Con gafas oscuras y el gesto serio, Gerard Piqué aterrizó en el aeropuerto de Miami por primera vez desde la mudanza de su ex Shakira y sus hijos. El deportista, que ha pasado unos días en Abu Dabi con su novia Clara Chía, llegó solo a Estados Unidos, donde pasará los próximos días con Milan, de 10 años, y Sasha, de 8. Según los detalles del acuerdo de separación al que llegó con la colombiana, Piqué pasará diez días al mes con los niños. Así esta escapada se produce poco más de una semana después de que los abogados de Shakira y Piqué se reunieran para cerrar los últimos los detalles del convenio de separación de la expareja con respecto a los niños y para asegurar que dicho convenio sea homologable en Miami, tal y como informó el diario La Vanguardia.
Los padres de Shakira se reúnen con su hija y sus nietos en Miami
Shakira, primeras imágenes de su nueva vida en Miami
La llegada del jugador levantó una gran expectación en el aeropuerto, pues muchos fans se hicieron eco de su llegada captando las imágenes del deportista saliendo de la terminal. Aunque había algunas cámaras esperándole, evitó hacer declaraciones acerca de los planes que tiene estos días con los niños.
Quince días después de que Shakira pusiera fin a su etapa en Barcelona e
iniciara una nueva vida en Miami ju
nto a los dos hijos que tuvo con el exfutbolista, Gerard y Clara, su pareja, ponían tierra de por medio y disfrutaban de una escapada romántica, que curiosamente, coincidía con el 24 cumpleaños de Clara.
Unos días de desconexión que precedieron a una breve estancia en Asturias, donde Piqué se reunió con su amigo, el streamer Ibai Llanos, que tenía un compromiso publicitario. Esta fue la breve escala que hizo en España antes de poner rumbo a Miami, donde la colombiana ha iniciado su nueva vida. Shakira ha aprovechado estos primeros días para reencontrarse con sus amigos y acudir al concierto de Juan Luis Guerra, espectáculo del que disfrutó con su hijo Milan. Dejando atrás su complicada separación del exjugador del Barça, la de Barranquilla se ha centrado en su familia pues no solo sus hijos son el foco de sus atenciones sino que sus padres, que están delicados de salud, también son objeto de los esfuerzos de la artista.
Estaría además buscando una nueva casa, un lugar que cuente con mayor privacidad y seguridad de la que tiene ahora en su mansión de North Bay Road, donde también tienen residencia estrellas como Jennifer Lopez, Ricky Martin y Matt Damon. En los últimos días se la ha podido ver por la lujosísima y paradisíaca Fisher Island, una zona exclusiva ubicada en la misma capital del estado de Florida. Se trata del barrio más rico de Estados Unidos, donde sus alrededor de 1.300 vecinos poseen unos ingresos anuales de 2.5 millones de dólares (2.27 millones de euros), según datos de Bloomberg.
La espectacular y preciosa isla privada de más de 87 hectáreas está pegada a Miami Beach y allí tienen casa otras superestrellas como la actriz Julia Roberts o la presentadora Oprah Winfrey. Entre sus encantos destaca su playa de arena blanca traída de las Bahamas.