El futbolista Dani Alves abonanaba la mañana de este lunes 17 la cárcel por primera vez desde que ingresara en prisión el pasado 20 de enero para volver a declarar ante el juez por el caso que se le imputa. El deportista, que en mayo cumple 40 años, se puso de nuevo ante la magistrada que instruye la investigación de manera voluntaria y para dar su versión sobre lo ocurrido en la discoteca Sutton en la madrugada del 30 de diciembre. En su comparecencia ha admitido por primera vez que hubo relaciones íntimas con la demandante indicando que había química e interés mutuo. Además ha dicho que en su primera versión mintió para que su esposa, Joana Alves, no se enterara de la infidelidad.
Joana Sanz explica los motivos de su última visita a Dani Alves en la cárcel tras su separación
El que fuera jugador del Barça ha dicho que conoció a la demandante en la zona VIP del local nocturno y que estuvieron bebiendo y bailando juntos. Según sus palabras, al haber interés mutuo decidieron intimar en el baño, del que entraron y salieron por separado porque así lo pidió Alves por discreción. Tambiénha explicado ante el juez que siempre es respetuoso con las mujeres y nunca da pie a un acercamiento si no ve una predisposición. Desde la defensa sostienen que el deportista no sabe por qué la joven lo ha denunciado y barajan que pudo sentire ofendida por no haber sido “atento ni afectuoso” tras ese momento de intimidad.
El deportista, que ha salido de la cárcel después de casi tres meses, el tiempo que lleva en prisión preventiva mientras se lleva a cabo la investigación de lo ocurrido, llegaba a los juzgados algo más tarde de lo previsto (tenía que haber sido trasladado en un furgón en torno a las 10.30 horas, pero un error de comunicación entre el juzgado y la prisión ha retrasado su comparecencia). El letrado de la defensa, Cristóbal Martell, y la abogada de la presunta víctima evitaron hacer declaraciones a su llegada a los juzgados. Tal y como establece la ley, una persona investigada puede declarar las veces que considere oportunasdurante el proceso judicial.
Después de esta nueva declaración, que se produjo a puerta cerrada, el fiscal, la abogada de la presunta víctima y la magistrada podían hacer preguntas. Tal y como informa La Vanguardia, la defensa del jugador presentará de nuevo una petición para que sea puesto en libertad después de esta nueva comparecencia, en la que se mostró un estudio de las grabaciones de las cámaras del local donde sucedieron los hechos. En sus anteriores declaraciones, el deportista ofreció diferentes versiones acerca de los sucedido aquella noche, siempre defendiéndose de los hechos que se le imputan. Entonces estas diferencias fueron explicadas por el deportista explicando que quería proteger a la joven y también su matrimonio.
A lo largo de estas semanas ingresado en la cárcel, el jugador ha recibido las visitas de sus familiares y de su exmujer, Joana Sanz, que, a pesar de haber anunciado su separación, comentó que seguirá interesándose por el estado del deportista. El pasado 15 de marzo, a través de una carta, la modelo anunciaba su ruptura matrimonial y reflejaba sus sentimientos tras lo ocurrido. “Han sido meses horribles, no los más duros de mi vida, porque he enfrentado muchas tormentas, pero sí que muy oscuros y dolorosos. La sensación de abandono y soledad vuelve a tocar mi puerta. Miles de "por qué" sin respuesta. Elegí como compañero de vida a una persona que, ante mis ojos, era perfecta. Siempre estuvo cuando más le necesitaba, siempre me apoyó en todo, siempre me impulsó a crecer, siempre cariñoso, atento... Me cuesta tanto aceptar que esa persona pudiera romperme a mí en mil pedazos”.
El exjugador del Barcelona ingresó en prisión provisional y sin fianza el pasado 20 de enero, una situación que por el momento no se ha modificado. La Audiencia de Barcelona decidió el pasado 21 de febrero mantenerle en este régimen denegando el recurso de la defensa del deportista, que pedía su puesta en libertad. Continúa así en el módulo 13 de la cárcel de Brians 2, al que fue trasladado desde el centro Brians 1, ubicado en Sant Esteve de Sesrovires a unos 36 kilómetros de Barcelona, para garantizar la seguridad y la convivencia.