Joaquín Cortés y su familia atraviesan un complicado momento. El bailaor, de 54 años, permanece ingresado en un hospital de Madrid donde fue atendido de urgencia tras perder el conocimiento mientras jugaba con sus hijos y después de varios sustos y "momentos de angustia" y se encuentra a la espera de varias pruebas médicas que determinen su diagnóstico. Mientras tanto, y pese a que la incertidumbre es la gran protagonista de sus horas, está arropado por su pareja, Mónica Moreno, uno de los más fundamentales pilares de su vida. Repasamos cómo iniciaron su historia de amor y algunos detalles de la mujer que robó el corazón al artista cordobés.
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Más de dos décadas han pasado desde que Joaquín Cortés y Mónica Moreno se conocieron en Madrid, aunque no decidieron emprender caminos conjuntos hasta unos años más tarde. Aunque, tal y como confesó el bailaor, su romance "fue como una película" desde que se vieron por vez primera, pues se quedaron completamente prendados el uno del otro, sus comienzos no fueron fáciles. Tras tener varias citas y cuando todo parecía ir sobre ruedas, Mónica desapareció sin previo aviso, algo que tiempo después explicó en una entrevista a Vanity Fair en la que reconoció que se sentía sobrepasada por el mundo que rodeaba a Cortés: "Me daba miedo", admitió.
Fue hace algo más de 14 años cuando Mónica decidió ir al domicilio del andaluz para brindarle su apoyo tras el fallecimiento de su madre. Aunque desafortunadamente este tenía una nueva pareja, cuando aquella relación terminó, ambos supieron que había llegado el momento de darse una nueva oportunidad. Pese a que no han sellado su amor pasando por el altar, Cortés y Mónica tienen a los dos mayores tesoros fruto de su preciosa historia: sus dos hijos, a quienes se refieren como su "gran obra maestra", Romeo, de 4 años, y Andrea, de 2, con quienes viven a caballo entre Lisboa y Madrid. "Nos ha cambiado la vida en todos los aspectos posibles. Nos ha hecho más vulnerables para afrontar el día a día, pero más valientes para afrontar la vida", expresaba hace unos días Mónica sobre su faceta como mamá y el rol de padre de su novio, una burbuja de diversión y sacrificio a partes iguales.
A sus 39 años, Mónica es el mayor apoyo de Joaquín Cortés también en lo profesional. Tanto es así quellegó a dejar aparcada su labor como psicóloga para apostarlo todo por la carrera del artista, en la que los traslados y viajes son constantes. Enfocada en su maternidad, hasta el punto de que es incapaz de imaginarse dando un solo paso sin la compañía de sus pequeños, y apasionada de la naturaleza, el sol, el mar, la música y el arte en general, ha preferido mantener una postura discreta y hermética sobre su vida privada de cara a los focos.
Aun así, de vez en cuando comparte con su comunidad virtual algunos instantes especiales, como su presencia en los ensayos de Cortés, dedicatorias cargadas de cariño en los cumpleaños familiares, escapadas vacacionales o diferentes consejos aplicados a la educación de los retoños que ofrece desde sus conocimientos técnicos.
Ahora la familia al completo se encuentra afrontando unos días difíciles en la capital con la compañía de su abuela yse han visto obligados a cancelar sus vacaciones de Semana Santa, en las que iban a descansar y disfrutar de la playa. "Se están portando como campeones", ha contado Mónica sobre sus niños en su perfil social, en el que tiene más de 36.000 seguidores: "¡Cada día un día menos para salir!", ha dicho sobre el estado de salud de su adorado novio, del que ha dado más detalles en las últimas horas.