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El presentador de televisión Iñaki López, que anunció el pasado viernes que volvería a ausentarse de su programa Más vale tarde debido a los problemas de salud que arrastra, ha reaparecido sin embargo de nuevo en el espacio junto a sus compañeros. Pese a que había apuntado que estaría unos días de baja, el periodista comentó que todo se quedó en un susto y que afortunadamente no tendrá que ser operado. Cristina Pardo bromeaba al presentar a su compañero. “Igual ustedes no lo saben, pero como aquí vamos a golpe de sobresalto… El viernes Iñaki estaba con un pie en el otro barrio y de pronto aquí está”. Entre risas, Iñaki, de 49 años, aseguraba que de momento está bien: “Voy bien. Creo que puedes contar conmigo”.
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Iñaki López y Andrea Ropero, unidos en lo personal y lo profesional: así es su familia
La semana pasada López anunció que de nuevo sufría un problema en uno de sus ojos, lo que le llevaría a ausentarse por segunda vez de la televisión. “He recaído. Ahora del otro ojo. No os veré en un tiempo. Gracias por vuestros ánimos. Os echaré de menos” escribía, avanzando una baja que finalmente no se ha producido. El presentador sufrió a principios de año un desprendimiento de retina que le tuvo apartado de los platós. Él mismo contaba lo ocurrido cuando se puso de nuevo delante de las cámaras a finales de febrero.
“Hace un mes aproximadamente acudía, debido a molestias en el ojo, al hospital de La Paz, dondeme localizaron un desprendimiento de retina, el segundo en mi haber, un año después del primero. Afortunadamente y gracias a la pronta intervención de los médicos y del retinólogo, todo está en su sitio y parece que podré volver a veros más pronto que tarde", contaba, subrayando que solo veía sombras y únicamente reconocía y ubicaba a las personas por el sonido de su voz.
“En esa sanidad pública que tanto nos cuida y que tenemos que defender me encontraron una molestia que me va a tener un tiempo en el dique seco. Afortunadamente, cuento con un equipo de mimos y cuidados que ninguna aseguradora podría igualar. Os veo pronto", escribía el comunicador en sus perfiles refiriéndose a su mujer Andrea Ropero, reportera deEl Intermedio, y su hijo, que han sido, sin duda, su mayor apoyo durante su recuperación. La pareja ha tenido que hacer frente además en las últimas semanas al ingreso hospitalario de su hijo Roke, de cinco años, que permaneció en la Fundación Jiménez Díaz durante varios días, tal y como sus padres comunicaron.
