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El 26 de febrero Hiba Abouk compartió unas imágenes disfrutando con sus pequeños de las playas de Dubái. “Lo bueno de la vida”, reaccionaba su marido, Achraf Hakimi. Tan solo veinticuatro horas después, la noticia publicada por el diario Le Parisien, daba la vuelta al mundo: el futbolista estaba siendo investigado por un presunto delito de agresión sexual . La presunta víctima, de veinticuatro años, no quiso denunciar sino “hacer una declaración de violación”, según el rotativo, en la comisaría a la que acudió. Pero la gravedad de los hechos llevó a la Fiscalía de Nanterre a abrir igualmente las pesquisas. Esto ocurría pocas horas antes de que el jugador acudiera a la gala de los premios The Best de la Fifa, en París, donde declinó hacer ninguna declaración.
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Tres días después, el defensa del Paris Saint-Germain era imputado. De momento, el deportista guarda silencio públicamente, a la espera del desarrollo de la investigación abierta de oficio; igual que la actriz, que tampoco se ha pronunciado sobre las graves acusaciones que pesan sobre su marido, aunque sí ha borrado de sus redes sociales la mayoría de las imágenes en las que aparecían juntos. Un significativo gesto.
La actriz guarda silencio, aunque ha borrado prácticamente todas las imágenes que compartía junto al deportista, padre de sus dos hijos
Las primeras fotografías de Hiba Abouk, de treinta y seis años, tras estallar la polémica se han tomado en Madrid, donde se ha refugiado en compañía de sus dos hijos, Amín, de tres años y Naím, de casi uno, mientras hace frente a la tormenta mediática y decide cuáles serán sus próximos pasos. Aunque seguro que busca tranquilidad en estos complicados momentos en su casa en la capital española, sí ha realizado algunos recados, como acudir a un centro deportivo y a su centro de estética de confianza. También fue con el mayor de los niños a unos grandes almacenes para comprar algunas cosas de ropa para el hogar. Aunque se ha publicado que el matrimonio ya estaba atravesando una crisis de antes, Hiba negaba dichas especulaciones el pasado 10 de enero. Y la última vez que vimos a la protagonista de El príncipe, el 16 de febrero en la fiesta de Bvlgari en el Museo Thyssen, comentaba a ¡HOLA!: “Mi vida en París muy bien. Hace mucho frío, muy gris, pero es una ciudad maravillosa y estamos ahí todos bien”.
Según la declaración de la mujer ante la policía, ella y Hakimi, de veinticuatro años, habrían empezado a hablar a través de Instagram el 16 de enero y, tras rechazar un par de invitaciones para cenar e ir a un club nocturno de París, finalmente decidieron verse la noche del 25 de febrero en la casa que el futbolista comparte con su mujer a las afueras de París, cuando esta se encontraba de viaje, momento en el que se habrían producido los hechos.
La última aparición pública de la pareja fue en Cannes, aunque en enero ella negó una crisis y recientemente nos decía: “París es una ciudad maravillosa y estamos ahí todos bien”
El deportista ha negado los cargos en su contra, su equipo mantiene su apoyo (no jugó el sábado pasado contra el Nantes por su lesión, pero sí estuvo en el campo con sus compañeros); y su abogado mantiene que “además, de los documentos que obran en poder de la policía judicial se desprende, en mi opinión, que el señor Hakimi ha sido, en este caso, objeto de un intento de extorsión”; según ha declarado una amigo suyo de su barrio madrileño en el programa Fiesta, el deportista le habría asegurado que le han tendido una trampa. La letrada de la joven, una de las más reconocidas de Francia, por su parte, ha dicho que “este caso requiere ser tratado lo más seriamente posible por parte de la justicia. Por ello, mi cliente ha decidido confiar en la justicia y solo en la justicia, y solo se expresará ante la justicia”.