,type=downsize)
La vida de Ana Fernández cambió para siempre hace ocho años. El 7 de marzo de 2015 su novio, el cámara de televisión Santi Trancho, fallecía en un accidente de tráfico con tan solo 32 años. El calor de los suyos y la pasión por su trabajo ayudó a la actriz a salir adelante con el recuerdo del que fuera su pareja siempre presente en su día a día. Con motivo de este triste aniversario, la intérprete madrileña, de 33 años, ha rendido un nuevo homenaje al cámara de programas como Frank de la Jungla o Callejeros. También ha compartido con todos sus seguidores el duelo que ha atravesado hasta superar la ausencia de su primer gran amor.
- ¿Por qué no vimos a algunos actores en la alfombra de los Goya? Ana Fernández cuenta los motivos
© Europa PressPULSA SOBRE LA IMAGEN PARA ACCEDER A LA FOTOGALERÍA
"Dicen que el tiempo cura las heridas... yo creo que nos ayuda a ir sosegando ese dolor que nos arrolla, ese cúmulo de sentimientos que deben quedarse en un lugar muy especial de nuestro ser, una cajita diseñada con cariño, para abrirla cuando queramos y regodearnos en recuerdos y en nostalgia. Cada minuto que pasa, cada hora, día, semana, mes, hasta ocho años en mi caso", ha comenzado diciendo la actriz de Los protegidos.
- Consecuencias de un duelo mal cicatrizado
- Cómo la pérdida de un amigo puede cambiar nuestra vida
Mientras Ana diseñaba su "cajita preciada" numerosas personas se pusieron en contaco con ella porque se sentían identificados con su situación. "Estábais sufriendo la pérdida de una pareja o amigo por accidentes de moto o coche y me pedíais consejo para salir adelante. A día de hoy no deja de abrumadme porque pienso: ¿Yo dar consejos? Si solo he seguido respirando", ha continuado.
© Europa PressSin embargo, el paso del tiempo le ha ido enseñando a gestionar su duelo. "Resulta que no solo se trata de respirar, se trata de rendirte ante la vida, universo, dios o como lo quiera llamar cada uno. Rendirse no es renunciar, es dejar de ir en contra de algo tan superior que está fuera de nuestro control, es hablar y hablar, es llorar, es acudir a una terapia en condiciones para tratar el tema, es aprender a dejar ir, es volver a llorar, es no dejar de aprender, es amar las cosas simples, es no desperdiciar tu tiempo, es abrirte al amor, es rendir tributo al alma, energía que se fue al otro plano, es hablar y volver a hablar", ha declarado la actriz, cuyo corazón está ocupado por Adrián Roma, vocalista del grupo Marlon.
© anafdz1989"Ya que hoy es un día especial en mi calendario, a todos los que estéis pasando por un duelo o una perdida aquí os dejo un trocito de mi aprendizaje. ¿Por que de eso se trata la vida, no? De aprender", ha señalado. Por último, se ha despedido del que fuera su pareja, publicando una foto en la que aparece grabando con su inseparable cámara. "Quierdo Junglecam, querido Santi, hoy te rendimos homenaje".
