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Isabel Pantoja está preparada para afrontar su nuevo reto profesional, la gira americana Enamórate, que arrancará el próximo 10 de febrero en Miami, parada que precederá a sus shows en Nueva York, Los Ángeles y Puerto Rico. Acompañada de su hermano y representante Agustín, de 58 años, la tonadillera, de 66, ha hecho las maletas y se ha dirigido al aeropuerto paracoger el avión que le llevará a vivir esta nueva aventura, en la que también estará arropada por su sobrina Anabel Pantoja, que ejercerá su papel de asistente personal.
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Con dos grandes maletas y cubriendo sus rostros con mascarillas negras, los hermanos Pantoja han salido a la calle preparados para poner rumbo a Estados Unidos. Isabel, que está feliz por su esperado regreso a los escenarios, ha lucido también unas grandes gafas negras que, unidas a la mascarilla, tapaban su cara prácticamente al completo, evitando que pudiera transmitir cualquier tipo de gesto. También ha cubierto su cuello con una bufanda beige, del mismo tono que su anorak. Para mayor confort en el viaje, se ha inclinado por unos pantalones holgados estilo jogger, una opción perfecta que le permitirá estar cómoda durante las horas de vuelo que tiene por delante. En cuanto al calzado, ha escogido unas botas de piel marrón con borreguito en su interior.
Por su parte, Agustín, que en todo momentoha estado pendiente de la artista e incluso le ha abierto la puerta del coche que les ha trasladado al aeropuerto, ha optado por un outfit casual compuesto por vaqueros en tono verde caqui, jersey de punto en crudo y chaqueta de botones en color mostaza. Ambos han sido muy discretos con la prensa allí presente y no han ofrecido declaraciones, aunque la madre de Kiko Rivera e Isa Pantoja se ha santiguado y ha dado las gracias cuando le han deseado buena suerte en su inminente tanda de recitales en el continente americano, cuyas entradas tienen un precio que oscila entre los 66 y los 1.000 euros.
© GtresonlinePara Isabel reencontrarse con su público es motivo de ilusión. Además, afronta estos conciertos con doble emoción, ya que por fin puede continuar con sus compromisos tras unos problemas iniciales. Aunque estaba previsto que actuara al otro lado del Atlántico entre el 11 de noviembre y el 10 de diciembre, se vio obligada a buscar otras fechas y poner en pausa ese deseado reencuentro con sus fans norteamericanos. ¿El motivo? Necesitaba presentar nuevos documentos antes de hacer una entrevista en el Consulado de Madrid para conseguir el visado. Finalmente logró solventar los trámites burocráticos, tal y como confirmaba el promotor de su gira, Eduardo Guervós, algo que consiguió a las puertas de dar la bienvenida a este 2023.
Tras unos meses complicados marcados por las desavenencias con su hijo Kiko Rivera, las muertes de su madre doña Ana y su hermano Bernardo y los problemas con Hacienda, por fin la vocalista ha dado un paso hacia adelante y se prepara para cruzar el charco, donde repasará algunos de los grandes éxitos de su repertorio ante un público entregado.
