Desde que Martín llegó a su vida, en la casa de María Pombo no hay tiempo para el aburrimiento y ahora que ya se preparan para la llegada de su segundo hijo, la revolución parece estar asegurada. Embarazada casi de 17 semanas, la influencer que ya ha dado a conocer queespera una niña a la que llamarán Vega, ya ha comenzado a preparar algunos detalles para cuando llegue el momento de su llegada, prevista para el próximo 16 de julio.
María, quien en un principio pensó que por su enfermedad (esclerosis) no volvería a ser madre, ya ha comenzado a preparar "el nido" para la llegada de la pequeña, colocando así algunos de los regalitos que le han llegado por adelantado y llenando los cajones con algunas de las prendas de ropa que a Martín se le ha quedado pequeña. Además,la influencer ha desvelado que ya tienen elegidos quiénes serán los padrinos de Vega y, salvos cambios de última hora, serán su hermana Marta y su cuñado, Jose Castellano, quienes no han tardado en manifestar su alegría tras enterarse de la noticia.
"Me muero de la ilusión" ha declarado Marta. Mientras que Jose afirmaba: "No veo el momento de que estes con nosotros". Y es que tanto uno como otro siempre han compartido con sus seguidores la gran pasión que sienten por su sobrino Martín, quien en cosa de cinco meses, será "destronado" como hijo único con la llegada de una nueva compañera de juegos.
La influencer, que ha dado a conocer que en muchas ocasiones tiene que dejar de lado las redes sociales para dedicarse a su hijo, quien a sus dos años reclama toda su atención, así como para sacar tiempo para dar rienda suelta a su faceta como empresaria al frente de su propia marca de ropa, 'Name The Brand', ha confesado que ya ha comenzado a tener los primeros antojos y que además de tener hambre a todas horas no puede dejar de tomar "zumo de naranja a todas horas".
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Pero antojos y embarazo aparte, María también se encuentra volcada en la mudanza a su nueva casa después de decir adiós al que ha sido su hogar durante casi tres años, escenario de su primera etapa como madre."Estos días me he dedicado a hacer limpieza extrema y a llorar por cerrar esta etapa, aunque a la vez me muera de ganas de vivir la siguiente", confesaba recientemente emocionada. La influencer y su marido, Pablo Castellano, llevan varios meses ultimando las obras de su nuevo chalet, que es más grande que el anterior, al que empiezan a llevar sus cosas poco a poco, ya que María recuerda su anterior mudanza como una de las cosas "más estresantes de su vida".