Después del huracán mediático que ha supuesto el ingreso en prisión provisional del futbolista Dani Alves por la presunta agresión sexual a una joven en una discoteca de Barcelona, su famila ha cerrado filas en torno al jugador.Su esposa, Joana Sanz vive sus días más difíciles. Aunque en un principio quiso mostrar todo su apoyo al futbolista brasileño con una imagen de sus manos entrelazadas y la palabra "juntos", la modelo tinerfeña ha optado ahora por permanecer callada y no pronunciarse directamente con respecto a los hechos que se investigan sobre su marido.
-La exmujer de Dani Alves habla de lo mal que lo están pasando sus hijos
No obstante, el hecho de que la modelo canaria haya eliminado gran parte de las imágenes que tenía junto al futbolista apunta a un cambio de postura, aunque por ahora la modelo no ha confirmado nada sobre el tema. Pero a medida que se van conociendo más detalles sobre lo que sucedió la noche del 30 al 31 de diciembre en la discoteca de la Ciudad Condal, las versiones contradictorias del brasileño y la presión de sus seguidores, han terminado de afectar completamente al ánimo de Joana Sanz, que ha borrado la mayoría de fotos con su marido, a excepción de las colaboraciones publicitarias y alguna instantánea en la que se ve a Alves junto a un grupo de amigos o con la madre de Joana.
Este gesto, sumado a que la top model ha bloqueado los comentarios por el incesante aluvión de mensajes en torno al caso, ponen en evidencia lo mal que lo estaría pasando la modelo. Al ingreso en prisión de su marido, se suma el reciente fallecimiento de su madre, que murió el pasado 17 de enero a consecuencia de un cáncer de utero. "Mi madre ha fallecido hace una semana, apenas he empezado a asumir que ella ya no está como para que me atormenten con la situación de mi marido. He perdido a los dos únicos pilares de mi vida", compartía desconsolada y agradecía los mensajes de apoyo recibidos ante la difícil situación que está pasando. "Corazón, aguanta tanto dolor, por favor" era una de las frases que no dejaba de repetirse la modelo tinerfeña, que se casó con el futbolista Dani Alves en abril de 2016 en una ceremonia íntima en París y un año después oficializaron su boda junto a sus seres queridos.
Fabiola Martínez, exmujer de Bertín Osborne, ha tenido unas palabras de aliento hacia la mujer de Dani Alves, que está pasando su peor momento. La empresaria asegura que, aunque no es amiga de la maniquí de 29 años, sí que comparten diversas amigas en común y sabe que lo está pasando muy mal. "Yo no tengo amistad con ella, tenemos amigas en común, y es cierto que cuando te llega algo así, ella encima es una chica bastante joven, tengo entendido que no tiene hermanos, que su madre acaba de fallecer, pues tiene que ser bastante duro. A través de amigas en común sí que me he informado y me he querido interesar por su situación y lo está pasando muy mal, como es lógico. Hasta que no se sepa y la ley no determine exactamente qué es lo que pasó y cómo pasó, pues lo debe de estar pasando muy mal".