Juana Martín vuelve a hacer historia. Por segundo año consecutivo, la diseñadora cordobesa desfila en la Alta Costura de París , donde este 26 de enero presentará su colección Primavera/Verano 2023. Juana es la primera mujer española que forma parte del calendario oficial del mayor escaparate mundial de la moda, uniendo su nombre así a otros grandes creadores de nuestro país, como Balenciaga, Paco Rabanne y Josep Font.
El pasado verano, tras ser invitada por la Federación Francesa de la Alta Costura y de la Moda, debutó con Andalucía, una propuesta vanguardista y con guiños a la tradición y la cultura flamenca. No era la primera vez que Juana subía sus diseños a la pasarela de París, a la que llegó por primera vez en 2018. Ahora regresa a la Costura con Orígenes , una colección con la que vuelve a rendir homenaje a su tierra.
“Me falta el aire”, nos confesaba la cordobesa cuando hablamos con ella, días antes de viajar a Francia para ultimar los detalles de su presentación —tendrá lugar en la Catedral Americana de la capital del Sena—, en alusión al nerviosismo que le invade ante un desfile “de estas características. Hay muchas expectativas puestas en nosotros, y eso conlleva una gran responsabilidad”.
—Juana, llevas más de veinte años de carrera...
—Veintitrés años llevo ya, para ser exactos.
“Me fui a París con una mano delante y otra detrás, en una furgoneta, con nuestros trajes y nuestra ilusión, a la ventura, como aquel que dice”
—¿Y cómo te sientes al haber llegado hasta aquí?
—Ser la única mujer española en la historia de la Alta Costura es un logro bastante importante. Soy mujer, soy gitana, andaluza, que considero que son unos cánones poco usuales para todo lo que yo he vivido. El folclore, la cultura, homenajear de dónde venimos, al final todo eso nos ha llevado a estar en la Federación Francesa. Tal vez la gente no lo vea, pero para los que estamos metidos en la moda, es un logro bastante importante. Espero que en España se vea, porque no siempre se ve así.
—¿Te refieres a las críticas que recibiste hace años, cuando te presentabas en la antigua Pasarela Cibeles?
—Yo recuerdo vivir situaciones en Cibeles bastante dañinas, por ejemplo, gente que hablaba del desfile sin ni siquiera haber acudido a verlo. Me preguntaba, “¿por qué tanta adversidad?”. Pero eso también me hacía trabajar muchísimo más. Al final, decidí irme de la Fashion Week Madrid, enfrentarme a nuevos campos y salir de la zona de confort que supone estar en una pasarela como la madrileña. Me fui a París con una mano delante y otra detrás, en una furgoneta, a la ventura, como aquel que dice…
—Hiciste una gran apuesta y te salió bien.
—Sí, bueno, hay mucho trabajo detrás. Nosotros nos fuimos a Francia, donde no nos conocía nadie, en una furgoneta, con nuestros trajes y nuestra ilusión. Ya llevamos seis años desfilando en París, y en estos seis años hemos conseguido estar en la Alta Costura. Detrás de eso hay un trabajo enorme y muchas veces en solitario, porque no tienes apoyo de nadie, y es duro.... Pero con una ilusión enorme.
—¿Qué repercusión tuvo tu primer desfile de Alta Costura?
—Este año tenemos como colaborador a Christian Louboutin en el desfile. Nos buscó él, porque vio lo que hacemos y le encantó. Así que estará un diseñador internacional de zapatos como él junto a las joyas hechas por artesanos cordobeses, Plata Pura, que es una joyería sostenible, de plata reciclada.
“Tenemos como colaborador a Christian Louboutin en el desfile. Nos buscó él, porque vio lo que hacemos y le encantó”
—¿Cómo percibes la expectación por ver tu nueva colección?
—Tenemos confirmada prensa de todo el mundo en el desfile. No tenemos dónde sentar a tantísima gente que ha confirmado, todo el mundo quiere venir. Nos ha llamado prensa de China, de Nueva York, de Arabia Saudí, de Japón…No sé cómo lo vamos a hacer, pero es una satisfacción enorme y hace que nos sintamos orgullosos del trabajo que hacemos.
—Háblanos de Orígenes.
—Se llama así porque está muy vinculada a mi historia, a cómo he trabajado. Echando la vista atrás, a ver cómo empezamos, cuáles son nuestros orígenes, de dónde viene esa creatividad, que muchas veces la conseguía en los veranos, con la familia en Málaga, en la playa, delante del mar . Significa eso, de dónde vengo, qué es lo que me ha influido en toda mi carrera, como mi familia, que ha sido una parte muy importante; mi padre, que ya no está con nosotros, ha sido una persona muy importante en mi vida y en mi carrera, en mi día a día, todo eso también influye.
—¿El blanco y el negro, tus colores insignia, están presentes en esta colección también?
—Hay una parte muy importante de mi carrera que es el blanco y negro, desde hace muchos años ya. En esta hay algo de color.
—¿Qué crees que ha visto en ti la Federación francesa?
—Nosotros trabajamos artesanalmente, seguimos trabajando todo a medida, y en Alta Costura se trabaja a medida y tiene unos requisitos bastante importantes, lo cual, si no los llegamos a cumplir, no hubiéramos pasado ese casting tan exhaustivo que ellos hacen. Creo que han visto una mujer actual, que detrás de lo que hacemos siempre hay una historia que contar. Hablamos de la Alta Costura, de la culminación de la moda, en lujo, en trabajo, en artesanía, es decir, hay pocas cosas que le puedan sorprender a la Federación y somos una marca pequeñita. Como empresaria y diseñadora estoy delante de mi marca. Creo que la federación ha visto en mi la historia que cuento en cada desfile, el ser mujer, el proceder de una cultura, el luchar por lo que creo, el reivindicar también mucho el flamenco, que soy gitana... Nosotros hemos evolucionado una barbaridad, nuestra cultura es muy avanzada, pero la raíz de toda esa cultura son las tradiciones y al final es el ADN de la marca.
—Nos comentabas que quiere ver tu desfile la prensa de China o Arabia Saudí, ¿estás presente en esos países?
—Trabajamos mucho con showrooms de Emiratos Árabes. Ahora mismo, la firma está teniendo una transición muy importante y somos conscientes de que se avecinan muchos cambios. Hemos tenido propuestas de muchos sitios y lo último que nos ha llegado ha sido de Beverly Hills, que quieren nuestras prendas allí. Cada día tenemos proposiciones nuevas, a la gente le gusta cada vez más lo que hacemos y se interesan por nosotros.
—De Córdoba, donde empezaste, a París... La diferencia será enorme.
—Es un mundo totalmente diferente, la moda allí es otra dimensión, es otro concepto. Es otro mundo, en todos los sentidos, para lo bueno y para lo malo. Te sorprende todo, cuanto más trabajas, más necesitas, más cuesta. Siempre que trabajas a ese nivel comprendes que es mucho más complicado, porque es mucho más caro, más gastos, pero bueno, ahí estamos. Siempre digo, si estamos aquí es por algo y vamos a intentar luchar por lo que somos, por la historia que hemos creado, el tiempo que podamos o el que nos dejen.