Poco a poco, Alice Campello va recuperándose de las complicaciones derivadas del parto de su cuarta hija, Bella, que llegó al mundo el pasado nueve de enero. Después de pasar varios días ingresada en el hospital en la unidad de cuidados intensivos, la modelo italiana ya descansa en casa y ha compartido con su amplía comunidad de seguidores cómo está después de superar este delicado bache de salud. "Yo me encuentro mejor, pero lloro muchísimo todavía. Estoy muy sensible, todo lo típico del posparto, pero estoy empezando a andar y a hacer la vida de antes". De la misma manera, se mostraba muy agradecida por todas las muestras de cariño que le habían hecho llegar. "Habéis estado muy pendientes. He recibido muchos regalos que me han llenado el corazón, muchas gracias".
La influencer también ha querido hacer una reflexión sobre la importancia de lasdonaciones de sangre. "Muchas veces no te das cuenta de las cosas hasta que te pasan. Gracias a las personas que han donado sangre, yo estoy ahora aquí. Os ánimo muchísimo a todo el mundo, porque es un pequeño gesto que salva la vida de muchas personas". Así mismo, la esposa de Álvaro Morata ha asegurado que se unirá a esta acción solidaria tan pronto como le sea posible, ya que será una de las primeras cosas que hará cuando se encuentre del todo bien.
Así son los tres traviesos hijos de Alice Campello que ejercen de ‘enfermeros’ con su hermana Bella
La pequeña Bella, la alegría de su casa
La maniquí también se ha deshecho en halagos con la benjamina de su hogar a la que ha descrito como una niña "preciosa y muy sana". La niña ha robado el corazón de su toda su familia, y, en especial, de sus tres hermanos mayores: los mellizosAlessandro y Leonardo (4) y Edoardo (2), que, como bien ha asegurado la empresaria,están "locos de amor" y han recibido a Bella con los brazos abiertos ejerciendo de "enfermeros". A buen seguro que, en poco tiempo, la bebé se une a sus curiosos juegos y travesuras.
El precioso momento en que Bella, hija de Alice Campello y Álvaro Morata, conoce a sus padrinos
Por su parte, Álvaro Morata también ha estado en todo momento al lado de su mujer, dándole todo su apoyo y declarando la admiración que siente por la valentía que ha demostrado ante esta dificultad. "Han sido los peores días de mi vida. Eres una luchadora y un ejemplo para mí". Para celebrar que lo malo ha pasado, en el último partido del Atlético de Madrid de Copa del Rey, en el que los rojiblancos se alzaron con la victoria, el delantero le dedicó uno de sus tantos a su recién nacida, metiéndose un dedo en la boca, simulando esa costumbre que tienen los bebés de chupar sus manos, enviando un mensaje repleto de amor a los suyos.