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ana rosa quintana hola4094© ANTONIO TERRÓN

Ana Rosa Quintana: ‘Hay que asimilar que padeces cáncer y no estoy curada’

La presentadora nos cuenta cómo ha vivido todos estos meses


13 de enero de 2023 - 7:54 CET

“Viendo más la luz”, así describe Ana Rosa Quintana el estado actual en el que se encuentra. Tras detectarle un carcinoma en una mama hace apenas un año, la ‘reina de las mañanas’ hacía un parón y se alejaba de la pequeña pantalla –la primera vez en más de diecisiete años–, para iniciar su recuperación, que se prolongaría hasta once meses después. En octubre de 2022, reaparecía para coger, de nuevo, las riendas de su programa y ahora, se sincera con ¡HOLA! para contarnos su emocionante relato de lucha y recuperación.

“Hace exactamente un año que yo estaba empezando con la quimio y hoy ni me podía imaginar estar así”. Cuando escuchó su diagnóstico, se quedó en shock. Aunque reconoce que no lloró, sí que sintió pena y temor por sus tres hijos, al pensar, por un momento, que podría perderse todo lo que les quedaba por vivir, sobre todo a los mellizos, Juan y Jaime Muñoz, nacidos de su segundo matrimonio, con el empresario Juan Muñoz. Sus tres hijos viven alejados de los focos y no les interesa en absoluto este mundo: “Ellos son anónimos y yo voy a luchar con uñas y dientes para que siga siéndolo”, reconoce la periodista.

“Hay que asimilar que padeces cáncer y que no estoy curada, algo que, supongo, el médico me lo dirá dentro de cinco o seis años”
Ana Rosa Quintana HOLA4094© ANTONIO TERRÓN
La periodista se reincorporó a su programa en octubre de 2022. “Los médicos me pidieron que no siguiese con el ritmo con el que trabajaba antes, porque me iba de casa a las seis de la mañana y regresaba a las siete de la tarde”.

Tras conocer su diagnóstico, decidió ponerse en contacto con a una naturópata para seguir una dieta, basada en alimentos naturales y suplementos, y poder así, contrarrestar toda la medicación.

Reconoce que “todo está igual que antes de la operación”, y lo define como “milagros de la cirugía”, pero deja claro que no aún no está curada: “Hay que asimilar que padeces cáncer y que no estoy curada, algo que, supongo, el médico me lo dirá dentro de cinco o seis años”. Pero, de momento, Ana Rosa sonríe y se somete a todas las pruebas rutinarias tras acabar el tratamiento de quimioterapia. “Los marcadores tumorales están bien. Me hago una analítica cada mes y una prueba de imagen cada tres, pero hay que ser muy consciente de que en una revisión pueda ocurrir algo”.

“Cuando me quedaban las últimas cuatro quimios, que ya iban a ser distintas a las anteriores, como ya me adelantó mi oncólogo, me afeité la cabeza antes de que se me cayera el pelo”
6X3A0619 I-Collage-U87825402661JCb© ANTONIO TERRÓN

Optimista todo el tiempo

La presentadora tiene el coraje de una luchadora, de esas mujeres que no se rinden y fue optimista desde su diagnóstico y nunca pensó que no se iba a curar. “Tengo mucha fe en Dios, pero también en la ciencia y creo mucho en mis médicos”. Y este optimismo lo encontró en su familia y su marido Juan, su gran amor incondicional, con el que lleva más de veinticinco años casada y quien tampoco se separó de ella en ningún momento -tan solo faltó un día porque tenía un viaje-. La acompañó a todas sus sesiones de quimioterapia. “Me hacía sonreír en todo momento, siempre de buen humor, divertido, con bromas, diciéndome lo guapa que estaba, lo maravillosa…”, nos cuenta. “Tiene una calidad humana impresionante”.

“De repente, te dicen que tienes cáncer y que necesitas quimio, radio y una intervención. Entras en shock, aunque yo no soy de llorar ni he llorado”
Ana Rosa Quintana y su marido HOLA4094© Lagencia Press
Ana Rosa Quintana y sus compañeros HOLA4094© GTres
Arriba, Ana Rosa Quintana y su marido, el empresario Juan Muñoz, fotografiados a la salida del santuario de Nuestra Señora de El Rocío. En esta imagen, junto a Ana Terradillos, Patricia Pardo, Joaquín Prat, Sonsoles Ónega y María Rey.

Sin duda, los duros momentos que vivió le ayudaron a darse cuenta de lo afortunada que es, por tener una familia, amigos y compañeros que estuvieron pendiente de ella en todo momento y quienes no la soltaron nunca de la mano. “Todos mis compañeros han estado durante los once meses que no he estado en la tele mandándome mensajes de ánimo todos los días. Eso me ayuda muchísimo”. Su objetivo es vivir como si no hubiera ocurrido y no tener pensamientos negativos, porque de momento, a Ana Rosa Quintana solo le preocupa el presente y vivir el momento.  Carpe diem  .