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Jessica Bueno rompía esta semana su silencio para hablarnos en ¡HOLA! de esta nueva etapa de su vida tras su divorcio de Jota Peleteiro después de diez años juntos, siete de ellos casados, y dos hijos en común, José Ignacio, de seis años, y Alejandro, de dieciocho meses. La que fuera Miss Sevilla 2009 regresa al mundo de la moda de manera profesional, según nos anuncia, y se lanza al mundo empresarial con su propia agencia de organización de eventos junto a una socia. Ahora, dice Jessica, se siente preparada para salir al mundo. “Más que un refugio, trabajar lo encuentro una necesidad. Necesito trabajar, tengo tres hijos (es madre también de Fran, de diez años, nacido de su relación con Kiko Rivera) y una vida que empieza desde cero. Me siento con fuerzas para hacer libremente lo que verdaderamente me guste y hacerlo por ellos”.
© Eugenia Silva & The Crew“A veces en la vida, suceden cosas inexplicables que, aunque al principio nos dejen en estado de shock , poco a poco hay que ir aceptando como han venido. Nada es inesperado, pero sí que en mi caso la familia era lo más importante. Hubiera luchado, pero, como te digo, hay que respetar y aceptar lo que Dios nos tiene deparado en nuestra vida. Estoy convencida de que todo pasa por un motivo”, confiesa Jessica, que en este proceso de recomponerse, enjugarse las lágrimas, y resurgir desde que se terminó su matrimonio a mediados de octubre, ha encontrado en la terapia una ayuda fundamental.
© Eugenia Silva & The Crew“Llevo dos meses más o menos y me está ayudando mucho a entender cómo soy y cómo no debería ser”, asegura. “Me he sentido triste, desolada, con sensación de abandono, pero, gracias a mi psicóloga, a mi familia y a todos los miles de mensajes que he recibido desde que se hizo público, empecé a encontrar sentido y la fuerza para ver todo de un modo positivo. Me gustaría aprovechar para dar las gracias a todas esas mujeres que me han escrito con mensajes tan reveladores, mujeres que se han sentido identificadas, mujeres que me ven como a una hija o una nieta y me han mandado abrazos desde la distancia, mensajes de apoyo y respeto. Me enorgullece tener todos esos mensajes porque son de personas de buen corazón que han gastado un poco de su tiempo para hacer feliz a otra persona que no conocen personalmente. Así que gracias, porque, en gran parte, gracias a eso hoy me siento fuerte y en el camino de ser una mujer plenamente feliz, empoderada e independiente”, nos comenta la modelo, que por supuesto ha contado con la de sus amigos y su familia: “Me siento afortunada porque he recibido mucho apoyo por supuesto, de mis padres y de los abuelos paternos de mis hijos también”. Con todo, aunque “me ha costado” ahora encara esta nueva etapa con “fuerzas para comenzar una nueva vida junto a mis hijos”.
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