Indiscutiblemente, Tamara Falcó ha sido una de las protagonistas de este 2022. Así lo certifica Google, que ha señalado a la marquesa de Griñón como uno de los personajes más buscados en nuestro país a lo largo de estos meses —por delante de Will Smith y la Reina Isabel II de Inglaterra—. La hija de Isabel Preysler ha tenido un año intenso a nivel profesional: ha estrenado docuserie en Netflix, ha abierto un restaurante temporal en el palacio ‘El Rincón’, ha consolidado su carrera televisiva también como colaboradora en El hormiguero —el programa de Pablo Motos, en Antena 3— y también ha cosechado nuevos éxitos con su firma de moda.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
Al ser preguntada por la lección que ha aprendido en este 2022, Tamara responde: “Confiar siempre en Dios y que la Virgen es mi madre y jamás me abandona”
Para cerrar este año de alegrías y también de sinsabores, Tamara se ha metido en las cocinas de Porcelanosa con ¡HOLA! y ha elaborado el menú perfecto para estas fiestas. Entre las cuatro recetas, propone el solomillo Wellington, que ya ha enseñado a hacer en casa, y fraise melba, un sofisticado postre que sirvió en el restaurante que abrió temporalmente en su palacio familiar.
—¿Qué supone ser imagen de Xtone by Porcelanosa?
—Estoy feliz. Los diseños de Xtone son una perfecta combinación entre funcionalidad y estética, dos valores muy importantes para mí.
—Ahora que estás reformando tu nueva casa, ¿también estás contando con Porcelanosa?
—Por supuesto. Porcelanosa es familia y siempre cuento con ellos para mis proyectos más importantes. Este no iba a ser diferente.
—Por cierto, ¿cuándo estarán listas las obras?
—Espero que en febrero. Estoy expectante de ver la obra terminada y ponerme con la decoración. Beatriz Silveira está haciendo un proyecto precioso. ¡Lo que más me gusta de todo es mi cocina!
“Fue una peregrinación muy significativa para mí. No voy a olvidarla jamás”, confiesa a ¡HOLA! sobre su experiencia como voluntaria en el santuario de Lourdes, realizada en octubre
Unas navidades diferentes
—Volvamos a los fogones. ¿Por qué nos propones este menú para Nochevieja?
—Creo que es un menú clásico, pero muy sofisticado, que encaja con todos los invitados. Empezar con un tartar con toques cítricos abre el paladar, junto a un buen vino. Luego, el solomillo Wellington es un acierto seguro. Por último, un pastel suave es el final perfecto.
—Aunque tu madre ya nos dijo que nunca te lo pide, ¿te éstas encargando de los menús navideños en los encuentros familiares?
—Me encanta preparar los menús para fechas señaladas como esta. Mi madre no me lo pide, pero… ¡luego es una catadora muy exigente a la que convencer!
“Todos deberíamos ir a terapia en algún momento. Ayuda a procesar sucesos o emociones de la mejor manera. Yo tengo la suerte de trabajar con una gran profesional”
—¿Has enseñado algún plato sofisticado en casa?
—Pues el solomillo Wellington, de este menú, lo he hecho en casa y les ha encantado a todos.
—Tu madre siempre confiesa que no cocina, pero ¿cómo se desenvuelve tu hermana Ana entre fogones?
—Viaja mucho y no tiene cocina en los hoteles. Pero, si se pusiera, Ana sería buenísima chef, porque es buena en todo lo que se propone.
—Hablemos de las Navidades. ¿Qué es lo que más te gusta de estas fechas?
—La Navidad es un momento que a nivel espiritual significa mucho, ya que conmemoramos el nacimiento del Señor.
“Al igual que cuidamos el exterior para encontrarnos bien, no debemos olvidarnos. Al igual que trabajo mi espiritualidad, y es indispensable, lo hago con mi salud mental”
—Este año, tu madre, tu hermana y tú habéis decidido pasar las fiestas en Madrid, en vez de viajar de nuevo a Miami. ¿Cómo están siendo estas Navidades diferentes?
—Echando mucho de menos a la familia de Miami. Pero, por otra parte, puedo disfrutar con los Falcó, que llevaba años sin hacerlo.
Las tradiciones en la familia Preysler
—¿Cómo decoráis la casa de tu madre? ¿Ponéis el belén y el árbol de Navidad?
—La decoración en mi casa es un must de la Navidad. A mi madre le encanta decorar el hall con un árbol inmenso y el exterior de la casa con luces navideñas. Es tradición. Acerca del belén, no encontrábamos el nuestro, así que fuimos con los niños a la Plaza Mayor a comprar figuritas. Ha quedado muy bonito y es una forma preciosa de que los niños entiendan el significado real de la Navidad, que es la llegada de Jesús.
—¿Seguís alguna otra tradición especial en la familia Preysler?
—Ninguna en especial. En Nochebuena, siempre vemos el discurso del Rey y, después de cenar, ponemos villancicos y abrimos los regalos.
—¿Cómo pasarás la Nochevieja?
—Rodeada de familia y amigos. En un entorno íntimo, donde despedir este año y darle la bienvenida al nuevo que viene.
Sobre los hijos de Ana Boyer, dice a ¡HOLA!: “Son lo máximo. Soy totalmente consciente del efecto terapéutico que tienen en mí. Nos encanta disfrutar de la Patrulla canina y Mateo nos baila la Motomami”
—En algún momento, ¿os visitarán tus hermanos Chábeli, Julio y Enrique, que hace mucho tiempo que no pasan las fiestas en España?
—Este año, no. Pero ellos siempre están presentes, aunque la distancia nos separe físicamente.
—Si piensas en la Navidad, ¿qué recuerdos te vienen a la cabeza?
—Lo más especial que recuerdo es que venían mis hermanos de Estados Unidos. Yo esperaba ansiosamente desde que se iban en agosto hasta que volvían por Navidad. Eran momentos especiales y felicísimos.
—¿Qué balance haces de este año y qué lección has aprendido?
—Confiar siempre en Dios y que la Virgen es mi madre y jamás me abandona.
—¿Y qué dirías que ha sido lo mejor de este dos mil veintidós? ¿Con qué momento te quedas especialmente?
—Con momentos divertidos y positivos de mi familia y amigos. Además, de experiencias laborales muy gratificantes y nuevos proyectos que están por venir…
—Este año has consolidado tu carrera en televisión y también como diseñadora. ¿Cuál es el siguiente reto profesional que te has fijado para el dos mil veintitrés?
—Tengo uno que pronto podré contar, pero aún está en proceso… No os preocupéis, no voy a sacar un disco (ríe).
—¿Quizá, un proyecto de ficción? En todos estos años, seguro que te han ofrecido algún papel para alguna serie o película…
—(Ríe). Por ahora, no me han ofrecido ni un cameo… (Vuelve a reír). Pero el arte de la interpretación es algo que respeto mucho y no es algo para hacer a la ligera.
‘Cuidarme por dentro y por fuera’
—¿Te has fijado algún propósito personal para el nuevo año?
—Me encantaría dedicarme más tiempo de calidad para mí misma y para mi espiritualidad. Cuidarme por dentro y por fuera. También seguir realizando proyectos de trabajo que me llenen. ¡Ah!… También realizar un voluntariado.
—Precisamente, en octubre, estuviste en Lourdes como voluntaria.
—Pude disfrutar un fin de semana y viajar hasta el santuario de la Virgen de Lourdes junto a la Hospitalidad de Lourdes de Madrid. Fue una peregrinación muy significativa para mí y no voy a olvidarla jamás.
—A tu vuelta, también hiciste un retiro espiritual. ¿En qué consistió?
—Sí, en Talavera de la Reina, durante un fin de semana. Fue algo supersanador, que recomiendo a todo el mundo. Es impresionante lo que allí está sucediendo y todos tenemos heridas que necesitan ser sanadas.
“Espero que las obras de mi nueva casa estén terminadas en febrero. Por supuesto, estoy contando con Porcelanosa, como para mis proyectos más importantes. ¡Lo que más me gusta de todo es mi cocina!”
—A lo largo de estas semanas, mucha gente ha alabado tu entereza y tu fortaleza para enfrentar un golpe como el que recibiste. ¿Te has sorprendido a ti misma al respecto?
—Me ha sorprendido la cantidad de gente que se ha solidarizado con mi situación porque habían vivido algo similar. Hasta vi un sticker que ponía ‘Todas somos Tami’. Ojalá no todas lo fuésemos, pero, si hay gente a la que le haya ayudado mi ejemplo para sobrellevar una situación similar, me reconforta.
—Has recibido muchos apoyos, pero ¿quiénes han estado más pendientes y les das las gracias?
—Doy gracias a mi familia, a mis amigas y a la gente con la que trabajo. Todos me han acompañado, querido y apoyado en todo momento.
Una tía ‘enrollada’
—Tus sobrinos Miguel y Mateo fueron esenciales para que recuperases la sonrisa. ¿Eres consciente de su efecto sanador en ti?
—Miguel y Mateo son lo máximo. Soy totalmente consciente del efecto que tienen en mí y en todos los que estamos a su alrededor. Doy gracias cada día a Dios porque estén en mi vida. Son un auténtico regalo. Mi hermana Ana y Fernando son unos padres entregados a su educación y eso se nota mucho.
—Tú también estás muy entregada a tus sobrinos. Es más, sorprende cada vez que compartes vídeos jugando con ellos, porque te metes hasta debajo de la mesa. ¿Qué planes haces con los niños?
—Nos encanta disfrutar de la Patrulla canina. Y no vale que se lo ponga y yo desconecte, porque tengo que verlo con ellos sin ninguna distracción (ríe). Lo que me encanta es que Miguel entiende cuando me tengo que ir a trabajar y sabe que el resto de tiempo se lo quiero dedicar casi en la totalidad a él. Mateo también está graciosísimo y nos baila la Motomami (ríe).
—En tu última aparición pública, comentaste que estabas yendo a terapia, dando normalidad a un tema tan importante como es la salud mental.
—Creo que todos deberíamos ir a terapia en algún momento de nuestra vida. Ayuda a procesar sucesos o emociones de la mejor manera para uno mismo. Yo tengo la suerte de trabajar con una gran profesional que me ayuda mucho. Es muy importante no olvidar la parte interior. Al igual que cuidamos la exterior para encontrarnos bien, no debemos olvidarnos. Al igual que trabajo mi espiritualidad, y es indispensable, lo hago con mi salud mental.
—¿Por qué crees que cuesta tanto pedir este tipo de ayuda, cuando en países como Estados Unidos está completamente normalizado?
—Por suerte, desde la pandemia, hay mayor visibilidad y ha dejado de ser un tema tabú. Cada vez es más accesible a través de las redes sociales, libros, documentales...
—La cocina también tendrá un efecto terapéutico en ti.
—Sí. La cocina me deja expresar mi creatividad y eso resulta muy terapéutico. Igual que la moda.
—Con tanto trabajo, ¿cómo sacas tiempo para meterte en la cocina?
—Por suerte, trabajo en varios proyectos relacionados con la gastronomía y eso me hace inmensamente feliz. Algo que comenzó como un hobby se ha convertido en trabajo y lo disfruto mucho.
Su futuro como chef
—Este verano, abriste un restaurante temporal en ‘El Rincón’. ¿Hay intención de abrir uno permanentemente?
—Fue un proyecto precioso, pero muy duro. Abrir un restaurante propio es un sueño, pero, de momento, no puedo desvelar mis intenciones (risas). Lo bueno es que lo replicamos en octubre y tuvo mucho éxito. Otras compañías que lo vieron por Instagram nos han pedido que repliquemos la experiencia para sus mejores clientes. Es muy motivante… Ojalá algún día se haga realidad.
—No llegaste a terminar tu formación de Le Cordon Bleu. ¿Tienes planes de retomar estos estudios o de seguir formándote como chef?
—Con mi ritmo frenético, es complicado encajar horarios y llegar a todo. He terminado parte del curso y estoy segura de que pronto comenzaré con la repostería. Me encantaría que en Le Cordon Bleu trajeran el curso de plant based, basado en las técnicas más innovadoras para cocinar verduras… Ojalá llegue pronto.
“Desde joven he crecido con los medios de comunicación a mi alrededor. Mi nacimiento salió en la portada de ¡HOLA! —ríe—. Pero nunca deja de sorprenderme el interés que puedo generar”
—Patricia Conde ha hablado de su mala experiencia en MasterChef, que si le apagaban los electrodomésticos y que había favoritismos. ¿Te han sorprendido sus declaraciones?
—Mi experiencia en MasterChef fue muy positiva. Tuve unos grandes compañeros y aprendí muchísimo de todos los profesionales involucrados en el programa. Me quedo con eso.
—Hace un mes, cumpliste cuarenta y un años. ¿Cómo fue la celebración en Maldivas?
—Viajé con mi amiga Clara y después se juntaron mi madre, Ana, Fernando y los niños. Fueron unos días de muchas risas en un entorno idílico. La verdad, un planazo.
—Acaba de conocerse que has sido la personalidad más buscada en Google a lo largo de dos mil veintidós en España, junto con la reina Isabel II y Will Smith. ¿Por qué crees qué interesa tanto tu vida y cómo logras lidiar con la presión mediática?
—Desde joven, he crecido con los medios de comunicación a mi alrededor. ¡Mi nacimiento salió en la portada de esta revista! (Ríe). Pero nunca deja de sorprenderme el interés que puedo llegar a generar. Hay que aprender a vivir con ello y no atender a todo lo que dicen sobre ti.
—Eres uno de los nombres más demandados por las marcas. ¿Cuál crees que es el secreto de tu éxito?
—Estoy muy agradecida de que las marcas quieran que represente sus valores e imagen. El trabajo, la constancia y rodearse de un buen equipo son fórmulas para que todo fluya y funcione.