Will Smith pasó de la gloria a la más absoluta de las tragedias en cuestión de minutos. La misma noche en la que se alzó con su primer Oscar por su papel protagonista en El método Williams, en el que daba vida al padre de las populares tenistas Venus y Serena, su leyenda se veía empañada por la bofetada que le propinó a Chris Rock, presentador de la gala que hizo un comentario inapropiado del pelo de su mujer, Jada Pinkett, que sufre de alopecia femenina.
El bofetón de Will Smith a Chris Rock que avergonzó en la ceremonia de los Oscar
Los allí presentes pensaban que este golpe era parte del show, pero nada más lejos de la realidad, todo era verdad. La carrera del protagonista de El Príncipe de Bel-Air caía en picado por no saber controlar sus impulsos, un problema que lleva arrastrando desde su niñez, ya que se crió en un hogar con problemas de violencia y en el que las agresiones de su padre a su madre solían ser habituales lo que le hizo desarrollar un carácter, en ocasiones, agresivo como forma de defensa.
La Academia del Cine de Hollywood, sus compañeros de profesión y el público ldictaron una sentencia unánime: su acción fue desmesurada e inapropiada. Se plantearon sanciones, no podrá asistir a la gala de los Oscar en la próxima década, y, de manera voluntaria, dejó de ser miembro de esta asociación cultural. Además, algunos de sus proyectos fueron cancelados, como el filme de Netflix Fast and Loose. Su carrera parecía abocada al fracaso y solo quedaba una solución: desconectar para comenzar de 0.
El intérprete de Focus puso rumbo a la India para realizar un retiro espiritual que le permitió volver a la rutina con más fuerza que nunca. Su primera aparición pública, fue, precisamente, para pedir disculpas al que fuese su amigo. "Mi comportamiento fue inaceptable", declaraba el artista con lágrimas en los ojos. Un perdón que el humorista no ha aceptado, puesto que no quiso ponerse en contacto de manera directa con él y, en algunas de sus apariciones públicas, avivaba más la polémica insinuando que estas palabras le parecían poco sinceras y que Will buscaba hacerse la víctima cuando el único agredido era él.
Chris Rock pone una condición para hablar del altercado con Will Smith
Sin embargo, como si del ave fénix se tratase el actor ha sabido resurgir de sus cenizas y este mes de diciembre ha vuelto más fuerte que nunca con el estreno de la película Emancipation, que está disponible en Apple +. El actor tenía miedo de que la controversia pudiese provocar recelo y rechazo entre los espectadores, pero muchos expertos de cine ya catalogan este trabajo como favorito para los grandes premios de la industria. Quién sabe si dentro de poco escucharemos su nombre como ganador de la ansiada estatuilla dorada, redimiéndose así de los fantasmas del pasado.
Su familia su gran apoyo
En estos tiempos tan complicados Will ha encontrado cariño y compresión en su familia. Su esposa fue la primera en pronunciarse y declarar que aún tenían muchas heridas que sanar, pero que su matrimonio seguía siendo fuerte y que esperaba que tanto su marido como Chris pudieran quedar en buenos términos y dejar este conflicto atrás. Por su parte, sus tres hijos: Willow (30), Trey (23) y Jaden (21) también defendieron a su progenitor alejando que tan solo es una persona, y, que como todo ser humano, tiene derecho a equivocarse y aprender de estos errores.