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Estas están siendo unas Navidades muy diferentes para Ana María Aldón. Tras poner punto final a diez años de relación y cuatro de matrimonio con José Ortega Cano el pasado octubre, la diseñadora iniciaba la búsqueda de un nuevo hogar que no estuviera demasiado lejos del que hasta ahora había compartido con el torero y su hijo, José María, en la localidad madrileña de Fuente del Fresno. Y aunque encontrar una nueva residencia que cumpliera con sus exigencias no era tarea fácil, finalmente la gaditana ha acabado adquiriendo un chalet de dos pisos en El Casar, Guadalajara, por 250.000 euros.
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El domicilio, al que la diseñadora ya ha comenzado a mover todas sus pertenencias, se encuentra a tan solo 55 kilómetros del centro de la capital y a veinte minutos de la casa que hasta ahora compartía con el diestro. “He encontrado lo que me puedo permitir. Tampoco puedo sacar al niño de donde vive y meterlo en una jaula”, señalaba Ana María. Pero, además, quiso dejar claro que si no se había ido antes del domicilio conyugal había sido porque durante este tiempo ha estado haciendo varios trámites.
“No me iba a ir porque me lo dijera gente externa y ajena al matrimonio”, explicó la colaboradora televisiva, haciendo hincapié también en que su exmarido no la iba a ayudar con el alquiler. “No quiero nada para mí, pero sí que colabore económicamente en la manutención de nuestro hijo. En eso estamos de acuerdo los dos. Tengo dos manos y puedo valerme por mí misma”, aseguró la gaditana, quien ha vivido este proceso acompañada por su particular pandilla televisiva.