Es un momento difícil para Borja Moreno Solís, hermano de Fernando y Carlos Fitz-James Stuart. El más joven de los tres hijos de Matilde Solís-Beaumont y Martínez-Campos despidió el pasado martes a su padre, Borja Moreno Santamaría.
El exmarido de la aristócrata sevillana se encontraba en la finca familiar situada en la localidad onubense de Nerva cuando empezó a sentirse mal. Según ha podido conocer ¡HOLA!, nada pudieron hacer los servicios médicos por salvar su vida, y falleció tras sufrir un infarto de miocardio.
Borja, que contrajo matrimonio con la exduquesa de Huéscar y exesposa del actual Duque de Alba el 26 de diciembre de 2003 en el Ayuntamiento de la localidad sevillana de Sanlúcar la Mayor, vivió unos años felices junto a Matilde.
Fruto de esa unión nació el único hijo de la pareja, Borja Moreno Solís, que hace unos meses alcanzó la mayoría de edad. Años después vinieron las desavenencias entre la pareja, llegando incluso a demandarse y a interponerse denuncias mutuamente y la relación llegó a un punto de no retorno cuando Matilde ya no pudo soportar más y planteó el divorcio cinco años después, en el 2008, después vivir situaciones tensas que hicieron disolver el matrimonio.
La hija de los marqueses de la Motilla y Borja Moreno apenas tenían relación y la poca comunicación que tenían era por temas relacionados con su hijo pero ahora que el joven alcanzó la mayoría de edad, el contacto era nulo.
Borja tenía cuarenta y siete años y había fijado su residencia en la localidad vecina de Sanlúcar la Mayor, a pocos kilómetros de la capital andaluza y de donde procede la familia Moreno Santamaría (él era el menor de siete hermanos).
Actualmente, el sevillano estaba dedicado al sector agrícola y ganadero. De hecho, en su perfil de Linkedin aparecía que trabajaba en una empresa bajo el nombre de Natea Soluciones Agrícolas presente en numerosos puntos de la geografía española.
Hace un año y medio el amor volvió a llamar a su puerta. Y desde entonces compartía su vida con una conocida fotógrafa sevillana con la que estaba feliz y enamorado. Tal y como hemos podido saber, la novia de Borja está destrozada y desolada ante esta repentina e inesperada pérdida.
Fue despedido en la más estricta intimidad. La misa en su recuerdo se celebrará en los próximos días en la localidad sevillana de Sanlúcar la Mayor, pueblo en el que se sentía feliz y donde había decidido fijar su residencia. Allí estaban sus raíces y en apenas una hora llegaba a la finca familiar donde también estaba parte de sus recuerdos y donde disfrutaba con las labores del campo, una profesión que le apasionaba.