Aunque Catherine Zeta-Jones y Michael Douglas siempre han querido mantener a los dos hijos que tienen en común lejos de los focos y del mundo de Hollywood, Dylan, el mayor de ellos, ha dado un paso al frente acompañando a su madre en la alfombra roja. Ya estuvo a su lado el pasado mes de noviembre en la premier de la serie Miércoles —donde la actriz interpreta a Morticia Addams— y, ahora, ha vuelto a ir de su mano al estreno de su último proyecto televisivo, National Treasure: Edge of History, que ha tenido lugar en Los Ángeles.
La actriz, que a sus cincuenta y tres años lució tipazo con un vestido de lentejuelas con transparencias y un marcado escote en V, posó orgullosa con él y acaparó de nuevo todos los flashes. A sus veintidós años, Dylan se ha convertido en un chico muy atractivo y se enfrentó a las cámaras como todo un profesional.
Y es que, como se suele decir, “de casta le viene al galgo”, y, con unos padres que son dos pesos pesados de la meca del cine, conoce desde la cuna lo que es el mundo del espectáculo. Sin embargo, hasta el momento, no le ha llamado la atención la interpretación… Aunque no se sabe qué ocurrirá en el futuro. Este año se ha graduado en Ciencias Políticas por la prestigiosa Universidad de Brown y entre sus pasiones está el mundo del motor y el mar y, como muestra en sus redes sociales, es todo un aventurero que se atreve con todo, desde paracaidismo hasta submarinismo, buceo y esquí acuático.
Catherine, quien recientemente confesaba, en una entrevista con el diario The Telegraph, que su matrimonio con Michael Douglas había atravesado varias crisis, se encuentra ahora en un buen momento profesional, del que ha querido hacer partícipe a su hijo, quien el tiempo dirá si se anima a seguir sus pasos.