Javier Castillo y Verónica Díaz son una de las parejas del momento. Ella triunfa como influencer y empresaria de moda bajo el nombre de @modajustcoco, con casi 800.000 seguidores; y él es un auténtico maestro del thriller y uno de los escritores más leídos de nuestro país con cinco bestsellers a sus espaldas, que comenzaron con El día que se perdió la cordura. Junto a sus dos hijos, Gala y Bruno, y su perro, Kiwi, forman la familia Coquetes, cuyo día a día “atrapa” a miles de personas en las redes y están a punto de terminar un año inolvidable y lleno de metas alcanzadas... Pero el 2023 será aún mejor y ya nos adelantan que tienen muchas sorpresas preparadas.
Lo más importante que les espera, sin lugar a dudas, es la llegada de su tercer hijo, que se llamará Pablo. Será un gran acontecimiento que celebrar en el terreno personal, mientras que, en el laboral, tienen grandes proyectos en el horizonte que les harán estar en boca de todos. Los que ya han despertado una gran expectación son el nuevo libro de Javier, El cuco de cristal (saldrá el 1 de febrero), y la adaptación a la pequeña pantalla de su novela La chica de nieve (el 27 de enero, en Netflix), que cuenta con un elenco de lujo: Milena Smith, José Coronado, Tristán Ulloa... Un aperitivo de todo lo que está por venir. Su nombre sonará mucho y nosotros hemos podido hablar con ellos para conocer un poco más su lado más personal, cómo comenzó su historia de amor -que ya lleva dieciocho años- ycómo ha sido su camino hasta llegar al punto en el que se encuentran.
-Ya encaramos la recta final de un año que ha sido muy importante para vuestras carreras, pero sobre todo para vuestra familia, con el tercer miembro en camino. ¿Cómo estáis llevando la espera de Pablo?
-Muy emocionados e ilusionados. ¡Está siendo una época muy bonita! Los peques ya son cada vez más independientes y eso ayuda mucho.
-Ya pasáis a ser familia numerosa, ¿pensáis que será muy diferente pasar de dos niños a tres?
-Pues creemos que sí, pero que no será tan radical el cambio como lo es pasar de ninguno a uno. De uno a dos la cosa se complica un poco, pero nos coordinamos bien en casa. Ahora vamos a estar en minoría, así que… (risas).
-¿Cómo llevan Gala y Bruno que vaya a llegar otro hermanito?
-Están emocionados. Todos los días cuando se levantan nos preguntan “¿nace hoy? ¿Cuánto queda? Tarda mucho. Parece un viaje en coche divertidísimo.
-Estás serán vuestras últimas navidades siendo cuatro más Kiwi, ¿qué planes tenéis?
-Estaremos tranquilos en casa, disfrutando de la familia y amigos. El parto se aproxima y tampoco queremos coger vuelos y alejarnos de casa.
-¿Ya habéis empezado a decorar vuestra casa? ¿Os ayudan los niños?
-¡Por supuesto! Es una tradición familiar, siempre lo hacemos juntos. Subimos las cajas de la decoración de todos los años, compramos algún detalle nuevo, y las colocamos entre todos con música navideña de fondo. A Gala le gusta decorar con Maríah Carey sonando de fondo.
-Parece increíble que en una casa tan alegre como la vuestra, con una banda sonora de niños jugando se “cocinen” los thrillers más inquietantes y leídos de nuestro país. Javier, ¿dónde encuentras tu inspiración?
-Es algo que me preguntan muchísimo. Al final yo me encierro en “la estación”, que fue como bautizaron mis lectores al despacho, y ahí entro en mi mundo. Entro en el mood thriller y me dejo llevar. Al final uno es muchas cosas, yo he crecido con circunstancias particulares y creo que también influyen un poco en quién soy cuando estoy solo.
-El año que viene te esperan dos grandes proyectos: uno, tu próxima novela, ¿cuándo verá la luz El cuco de cristal?
-El 1 de febrero y la verdad es que estoy muy emocionado por todo lo que viene. Han sido dos años de escritura de una historia dura y compleja, llena de misterio y amor, y estoy seguro de que a los lectores les va a fascinar.
-Después, la adaptación de Netflix de tu gran éxito La chica de nieve. ¿Cómo estás viviendo la experiencia “dar vida” a una de tus historias?
-Está siendo un sueño y un camino muy especial. Se trataba de buscar la mejor manera de contar la historia de mi novela y trasladarla a España de manera audiovisual. Además, como se grababa en Málaga, podía escaparme de vez en cuando al set de rodaje y ver en persona cómo cada escena iba tomando forma. Me siento realmente afortunado.
-El tráiler ha impactado mucho, ¿nos dejará la serie sin aliento como el libro? ¿Hay diferencias con la novela?
-Os dejará sin poder parar de verla, estoy seguro de que muchos harán maratón porque es tan intrigante como el libro. Hay giros, drama y una protagonista que hemos conseguido que sea realmente especial y única como en el libro. También estoy seguro de que emocionará a partes iguales, porque es una serie llena de sentimientos y emociones. Obviamente es una adaptación, hay diferencias, la más importante es que no se desarrolla en Nueva York, sino en Málaga. Pero el alma está ahí, y he trabajado mano a mano con los guionistas para que así fuera.
-Han contado con un elenco de lujo para dar vida a tus personajes… ¿no te da un poco de vértigo?
-Más que vértigo es gratitud. Tengo la suerte de poder dedicarme a una profesión que me apasiona y escribir libros que a mí me gustaría leer. Me siento muy afortunado de que mis gustos coincidan con los de tanta gente. Sé que la historia lo tiene todo para conquistar a todo el mundo y toca temas que te remueven en cada plano.
¿Es difícil “no perder la cordura” cuando tus libros se convierten en bestsellers, se anuncian en Times Square y te llaman de Netflix para convertirlos en series?
-Todo lo que estamos viviendo es un sueño que jamás imaginé, pero siempre con los pies bien asentados en la tierra. Ahí tengo a mi familia, que es lo más importante para mí para recordarme siempre de donde vengo. Eso para mí es fundamental, mis raíces, mis lectores y el agradecimiento eterno que siento porque es gracias a ellos que estoy aquí. Trato de hacer las mismas cosas de siempre, no alejarme de mis pilares fundamentales y creo que es la única manera de no acabar perdiendo la cordura.
-Vero, tú también tienes el año que viene el primer aniversario del lanzamiento de tu firma CRVSH ¿Cómo ha sido la experiencia de lanzarte al mundo empresarial?
-Ha sido un sueño cumplido, pero también una época de mucho aprendizaje y trabajo. Al final, aunque en CRVSH está formado por un equipo muy completo y cada uno formado en un área concreta, hay muchas cosas que son nuevas para mí y voy aprendiendo día a día. Lo más duro sin duda es encontrar proveedores, una buena logística, llegar a los tiempos… no es fácil. Pero es un sueño cuando ves en tus manos el diseño al que tanto mimo has puesto, a la gente por la calle disfrutándolo o saber que marcas a las que admiro adoran CRVSH… Está siendo una revolución.
-¿Te ha sido difícil abrirte un hueco en el mundo de la moda?
-No ha sido fácil, pero creo que para nadie. El mundo de la moda es un mundo bastante hermético, pero una vez que conocen tu trabajo, la calidad del tipo de producto que realizas, lo pensado que está todo y la filosofía que hay detrás, la cosa cambia. Es un camino largo, pero hemos cumplido hitos increíbles mucho antes de lo que previmos.
-Eres una de las influencers más veteranas, ¿cuál crees que ha sido la clave para mantenerte en primera línea tanto tiempo?
-Disfrutar con lo que hago. Es fundamental, porque aunque ahora hay gente que crece mucho muy rápido, pero lo difícil es mantenerse en el tiempo y para eso tiene que gustarte lo que haces y hacerlo con pasión. Para mí compartir emociones por redes sociales es mi pasión.
-¿Cómo llevas las críticas? Porque hoy en día nadie se libra de comentarios hirientes en las redes.
-Pues las llevo bien porque sé que no son verdad. Una vez que aprendes que nadie tiene la verdad absoluta, una opinión concreta destinada a hacer daño pasa a tener menos importancia.
-Los dos habéis ido creciendo juntos, además de cómo familia, como profesionales, ¿cuál creéis que ha sido vuestra fórmula para conseguirlo?
-Pues no sabría decirte una fórmula, simplemente nos hemos ido dejando llevar por lo que nos llena, el trabajo que nos hace disfrutar y aprovechando cada oportunidad que nos iba surgiendo al máximo.
-Lleváis ya dieciocho años juntos, ¿cómo comenzó vuestra historia de amor?
-Comenzamos en 2004 y desde entonces no nos hemos separado. Al principio éramos unos niños y pensábamos que sería algo temporal, pero nos hemos ido dejando llevar y hasta el día de hoy. Disfrutando mucho de nuestra relación y cada una de sus etapas. ¿Quién conquistó a quién? Creo que fue algo mutuo. ¡Estábamos los dos colados el uno por el otro!
-¿Os imaginabais que acabarías llegando dónde estáis ahora, a punto de ser familia numerosa?
-Siempre ha sido nuestro sueño, formar una gran familia, pero no es algo que planifiques, sino que va llegando poco a poco, según nos íbamos sintiendo.
-¿Cómo os acabasteis dedicando a las redes y a la escritura? ¿Fue siempre vuestra meta?
-A Javier siempre le ha apasionado escribir, desde que le conozco escribe. En cambio lo mío fue más fortuito. Yo quería estudiar periodismo de moda, pero no me atrevía por las salidas profesionales y Javier me alentó a abrirme un blog escrito. Ahí las lectoras empezaron a pedirme fotos de mis looks y empezó a subir como la espuma. Después llegó Snapchat, luego Instagram, Youtube… hasta el día de hoy.
-Por último, ¿tenéis más sorpresas para 2023?
-Muchas, eso siempre. ¡Ojalá poder contarlas ya! Lo mejor siempre está por venir.