A los magos del terror les encanta que sus musas pasen las de Caín. A ver, al final, siempre se salvan. De los asesinos múltiples, los zombies o los fantasmas que viven en los desvanes, pero no se quedan roncas de milagro. Pero las cosas han cambiado. Ya no son las típicas rubias tontas que caen en la boca del lobo atraídas a sus fauces como las moscas en la miel. Ahora, son mujeres poderosas. Rubias, eso sigue siendo igual, pero se han convertido en heroínas que miran de tú a tú a aquellos que quieren aniquilarlas y luchan con todas sus fuerzas. Esas nuevas heroínas ya tienen, al menos, un rostro, el de Ester Expósito. Sexi, de curvas de infarto, melena a lo Veronica Lake y carácter. Y personalidad. E inteligencia. Así es en Venus, la película en la que Álex de la Iglesia y Jaume Balagueró, los prestidigitadores del género en español, donde han dado la oportunidad a una de las actrices de mayor proyección internacional. Una diosa de las redes, las marcas, las alfombras rojas… Una mujer o, mejor dicho, una estrella con cerca de treinta millones de seguidores. Han leído bien: treinta.
Y, sin embargo, en una conversación con ¡HOLA!, demuestra una humildad que desarma. “En la peli, sufro, pero es un nuevo concepto de personaje femenino. Es muy poco víctima… Mi Lucía es dueña de su propio camino y ella es la que va generando las situaciones. No es la típica pobre a la que le dan palos por todos lados, que se mete en los pasillos más oscuros sin querer… Ella se antepone a todo. Y busca sobrevivir con garra, ganas y fuerza”, explica esta nueva scream queen a la que le ha encantado experimentar y jugar con los código del cine de terror, pero desde su “libertad creativa y como mujer de su tiempo”.
“Convertirte en la mujer más deseada es raro. Tienes que ser consciente de que hay una parte de tu vida que va a cambiar totalmente. Que no hay marcha atrás”
Un tiempo en el que es la mujer más deseada, buscada, fotografiada, perseguida… ¿Agotador? “Raro. Hay que digerir muchas cosas. Estoy muy agradecida, las cosas van bien y hay mucha gente mandándome cariño y apoyo, pero tienes que ser consciente de que hay una parte de tu vida que cambia totalmente. Y que no hay vuelta atrás. Pasa y muchas cosas que eran no van a volver a ser las mismas. Nunca más”. “¿Ese es el precio a pagar?”, preguntamos: “Sí, y es alto. Soy consciente de que soy una afortunada. Pero eso no quita para que sepas que no es perfecto. Que no todo es brillo y fantasía. Que también tiene su lado oscuro”, nos cuenta Ester, el rostro más atractivo para infinidad de firmas. “Eso vino de manera colateral, de rebote, porque te prometo que yo nunca lo busqué”.