Manuel Carrasco estuvo anoche en El Hormiguero para presentar unos de sus trabajos más esperados, Corazón y Flecha, su nuevo disco que está a punto de ver la luz. El cantante, de 41 años, acudió al programa de Pablo Motos con un jersey muy abrigado que no pasó desapercibido. Algunos espectadores encontraron la firma a la que pertenecía, Zegna, del diseñador Ermenegildo Zegna, y compartieron su precio, 1.850 euros. La prenda que lucía el artista está confeccionada con cachemira de alta calidad y suavidad, y presenta un original diseño en dos tonalidades. Carrasco combinó el jersey con un pantalón negro y numerosas joyas: pendientes, anillos y pulseras. Además, se ha dejado bigote y unas patillas mucho más pronunciadas.
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El estilo de Manuel Carrasco ya nos llamó la atención a principios de año, durante su gira La cruz del mapa. El cantante se subía al escenario cada noche con llamativas y originales camisas. "Tiene una esencia y una personalidad que arrasa, y eso es muy importante a la hora de defender cualquier look", nos dijo su estilista, Antonia Payeras.
Este sorprendente cambio llegó tras un shooting con el fotógrafo Mario Sierra, una experiencia que llevó al equipo del artista a ser más creativo y a arriesgar un poco más con la moda. "Con Manuel me siento muy libre a la hora de trabajar. Yo propongo, lanzo ideas... él es muy abierto y se prueba todo", aseguró Antonia Payeras. La estilista también destacó el papel fundamental de Almudena Navalón, mujer del artista, en la elección de los looks. "Entiende de moda y en muchas ocasiones está presente", declaró.
No cabe duda de lo bien rodeado que está Manuel Carrasco. De hecho, sus hijos, Chloe, de cinco años, y Manuel, de dos, son sus mejores críticos musicales. "Yo estoy componiendo y noto cuando mis hijos cantan una canción, estoy pendiente y si les gusta la tengo que meter en el disco", contó en El Hormiguero. El cantante se emociona al hablar de los pequeños. "Los niños te cambian la vida, uno no es el mismo haciendo un disco cuando tiene una familia", reconoció. Y se emocionó al confesar que se encontraba en una etapa maravillosa. "Qué bonito es que mis hijos vean las cosas tan bonitas que está haciendo su padre".