El maratón de Nueva York , celebrada este domingo 6 de noviembre en la Gran Manzana, no supuso el desfile de celebrities que solía ser en el pasado. Como viene siendo habitual durante las últimas ediciones, hubo notables ausencias de grandes personalidades de la escena social patria. A saber: Alfonso de Borbón, Samantha Vallejo-Nágera , Luis Alfonso de Borbón, los hermanos Medina Abascal, José María Aznar Botella, Anne Igartiburu, la relaciones públicas María Fitz-James o Rosauro Varo, cuyas zancadas por los 42 kilómetros del circuito en la gran ciudad han dado para mucho en las páginas rosas y salmón cada vez que han acudido. Sin embargo, entre los 944 españoles que compitieron en esta edición no hay grandes estrellas del cuché, pero sí financieros, banqueros y hasta varios aristócratas.
Uno de los que no se quiso perder la cita fue Antonio Rodríguez-Pina, presidente del banco Deutsche Bank en España, que consiguió una buena marca: cuatro horas y un minuto. El ganador de la maratón fue el corredor guineano Evans Kiplagat Chebet, que tardó dos horas y ocho minutos. Del mismo sector bancario destacó la participación del joven Ignacio López Mancisidor, sobrino de Cristina Macaya, la gran anfitriona de Mallorca, quien completó la carrera en dos horas y cuarenta y nueve minutos. Otro banquero español que brilló en Nueva York fue Francisco de Borja Basagoiti De Oriol, nieto del marqués de Casa Oriol y director ejecutivo de la división de banca privada internacional del Santander en Suiza, que finalizó el recorrido en tres horas y cuarenta y un minutos.
El financiero no estuvo solo ya que se unió a la tradicional iniciativa solidaria de su primo, Cosme Primo de Rivera, un histórico de la maratón de Nueva York, a la que ha vuelto con gran ilusión dos años después debido a la prohibición a los corredores europeos por el COVID. Hijo de Miguel Primo de Rivera, figura clave de la Transición, es un gran especialista en el sector de la telefonía. Actualmente trabaja como director de Estrategia y Nuevos Negocios de la compañía Digi. Cosme terminó de correr los 42 kilómetros del maratón en cuatro horas y un minuto. Lo hizo para apoyar 11q España, una asociación fundada por él mismo y su esposa, Ximena García de Lago de la Guardia, padres de la pequeña Ximena, quien sufre el síndrome de Jacobsen y cuyo objetivo es conseguir fondos para investigar esta enfermedad rara.
“Fue el maratón más caluroso y con mayor humedad desde que hay registros. De hecho, el profesional que iba primero en gran parte de la carrera, un brasileño, se desmayó y no acabó... Y, por supuesto, mucha gente tuvo que ser atendida por golpes de calor, calambres,etc.”, nos confiesa Cosme. Junto a él también corrieron el ejecutivo Juan Riva; el banquero Manuel Gil de Santivañes, hijo del marqués del Vado; el empresario del diseño José Ignacio Mesa y el abogado Íñigo Alonso.
Del mundo de la empresa también destacó la presencia de Javier Fal-Conde, CEO del Grupo inmobiliario Arttysur. Dos de sus próximos proyectos son el complejo de ocio Puerto Tartessos, en Sevilla, y el resort de lujo Arttysur Lux Village en Sierra Nevada. De 54 años, es conocido en la prensa de sociedad por su extinta relación con la empresaria Fiona Ferrer, con la que salió durante dos años. A su vez, desciende de Manuel Fal-Conde, duque de Quintillo, Grande de España y jefe delegado del partido político carlista Comunión Tradicionalista. En la actualidad, Javier es vicecónsul honorario de México. Sin embargo, durante unas horas él y el resto de participantes conocidos se convirtieron en los ‘reyes’ de las calles de Nueva York.