Michael J. Fox atraviesa uno de los peores momentos de su vida. El pasado mes de septiembre, el actor tuvo que despedirse de unas de las personas más importantes de su vida: su madre Phyllis con la que estaba muy unido: "Mi madre vivió una vida larga y maravillosa. No había una mujer más venerada. Ella era una persona dulce. Le encantaba reír, se reía como loca", ha recordado el protagonista de Regreso al futuro en una de sus entrevistas más sinceras y emotivas para People.
Este no es el único duro golpe con el que carga el intérprete, puesto que, enfermo de Parkinson desde que tiene 30 años, ha revelado que el año pasado sufrió numerosas fracturas en provocadas por sus problemas de equilibrio y caídas frecuentes y una de ellas le llevó a pasar por el quirófano, con la desdicha, de coger una infección. Sin embargo, pese al dolor el actor demuestra un positivismo digno de admirar. Para él la clave está en pensar en las cosas buenas que hay en tu vida, y si no las hay, hacer algo para que sucedan, una filosofía que lleva arrastrando desde su cirugía de médula espinal.
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Precisamente, gracias a su gran fuerza de voluntad, está consiguiendo hacer frente a los avances de su enfermedad. A principios del mes de octubre consiguió uno de sus propósitos, caminar sólo y sin ayuda sobre el escenario de la Comic-Con de Nueva York, evento que compartió con su amigo y compañero de profesión Christopher Lloyd, al que dedicó unas palabras durante la reunión. “Personas como Chris han estado ahí siempre para mí”, y añadía: "Ha sido una lucha, pero estoy feliz. Digo esto porque espero que en algún momento las personas puedan encontrar la felicidad a pesar de lo que están pasando" palabras que dejaron al público conmocionados.
Otra de sus metas vitales es ayudar a personas que padecen la misma enfermedad que él. Por ello, en el año 2000, casi una década después de su diagnóstico, el actor creó la Fundación Michael J. Fox para investigar el párkinson y encontrar una cura para la enfermedad. Y por supuesto, con el objetivo de ayudar a personas que la padecen como él. Una causa noble por la que el próximo 19 de noviembre recibirá el Premio Humanitario Jean Hersholt . Este galardón reconoce sus esfuerzos,entre los que se encuentra recaudar más de mil millones de dólares para la investigación del Parkinson. Una forma de dar un toque dulce al que ha sido una de sus etapas más convulsas.
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