El mundo entero puede ver por fin desde casa Puñales por la espalda, la película que terminó de empujar a Ana de Armas al estrellato internacional antes de su último éxito, Blonde. El filme (disponible en HBO y Netflix) protagonizado por Daniel Craig le valió su primera nominación a los Globo de Oro y estuvo en la lista para alcanzar el Oscar, aunque finalmente se quedó fuera antes de llegar a la gala. No hizo falta, porque el personaje de Marta Cabrera se quedó en el corazón de todos los que entendieron la trama: la historia de una persona a la que la sociedad y el idioma no han ayudado, y aunque no es inocente tampoco es culpable, hablando de la escala de grises que a menudo se olvida a la hora de "juzgar" a un personaje desde la butaca del cine. Ahora, tres años después del estreno de Knives out (su título en inglés), llegará su secuela, Glass Onion, el 23 de diciembre aunque en esta no sale la intérprete hispanocubana.
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El personaje de Marta Cabrera hablaba también quién la interpretaba. De hecho, la propia Jamie Lee Curtis admitió que se dejó llevar por los prejuicios que también afectan a la protagonista de Puñales por la espalda, al considerar que Ana de Armas no tenía "experiencia ni sofisticación" al ser cubana y nueva en Hollywood. "Lo digo con verdadera vergüenza, pero asumí que porque venía de Cuba acababa de llegar", comentó la actriz de la saga Halloween. Sin embargo, lo que la intérprete desconocía es que su compañera se había labrado ya una carrera en España antes de aterrizar en Estados Unidos y participar en multitud de películas de mayor o menor presupuesto. Cuando rodaban este misterio Ana ya había formado parte del elenco de Blade Runner 2049, La gran fuga o La hija de Dios, con Keanu Reeves, Scott Eastwood, Harrison Ford o Ryan Gosling, entre otros actores de categoría.
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Por supuesto, Jamie Lee Curtis se comió sus palabras al ver el talento desbordante de Ana de Armas, y de hecho quiso presentarle a algunos compañeros de profesión que pudieran ayudar en su carrera, pero se quedó sin nada que decir cuando se enteró de que ya les conocía. Para entonces, la intérprete de Blonde ya había rodado la película de Marilyn Monroe y aprovechó para enseñarle una foto caracterizada como la ambición rubia: "Fue impactante porque ¡ERA Marilyn!".
Allá donde va, Ana de Armas ha conseguido enamorar y fascinar a su audiencia. De hecho, Blonde era una de las películas más esperadas de Hollywood desde hacía dos años porque todo aquel que la veía tenía solo buenas palabras para la interpretación de la actriz hispanocubana, y pese a los continuos retrasos era una conversación que siempre reaparecía. El director de Cannes, el hermano de Ben Affleck, Adrien Brody... todo el mundo consideraba que su trabajo era de Oscar. Sin embargo, este clamor de la crítica y los expertos llega gracias a lo que pasó con Puñales por la espalda, que consiguió ponerla en el mapa y el radar de todos.
"Este tipo de personajes no existen, son muy raros, es casi imposible ver latinas que hablan español y las que hay no tienen las mejores cualidades o posibilidades", decía Ana de Armas a Variety en 2019 sobre su papel en Puñales por la espalda. "Como la trama ocurre en una familia adinerada, no te imaginas que el personaje vaya a poder salir bien de la situación. Así que me encantó leer algo tan positivo, sorprendente, nuevo y fresco", decía la que fuera protagonista de El Internado, consciente de que Marta Cabrera le ha cambiado la vida.