Jesús Quintero ha fallecido a los 82 años a causa de una afección respiratoria según han confirmado sus familiares. El periodista era considerado uno de los profesionales más relevantes de la radio y televisión española y se ganó al público por su peculiar forma de entrevistar que revolucionó por completo el mundo del periodismo. Quintero vivió una vida intensa: tuvo tres grandes amores, dos hijas a las que siempre quiso con locura y se casó con 80 años. Actualmente vivía en la residencia residencia Nuestra Señora de los Remedios de Ubrique, por propia decisión, pero pensaba volver a vivir junto a María -su actual esposa- cuando su salud mejorase. Hacemos un repaso a la vida personal y momentos más emotivos del periodista onubense
Jesús Quintero ingresa en una residencia por 'complicaciones médicas'
El primer gran amor del periodista fué Ángeles Urrutia con la que comenzó una relación en 1992, con quien tuvo a su primera hija, Andrea, con la que compartió profesión y el gusto por la escritura. Andrea estudió Periodismo en la Universidad Autónoma de Barcelona y ha ejercido como portavoz de la familia estos últimos años. Después comenzó una relación con la periodista Joana Bonet, a quien concedió su última entrevista hace algo más de un año y con la que tuvo a su segunda hija, Lola, que estudió Políticas y Sociología en Inglaterra. En contra de lo que se ha publicado, Quintero y Joana mantuvieron una excelente relación tras su separación. Durante la entrevista antes mencionada, al ser preguntado por el amor, el periodista declaró que "había tenido amores importantes": "Me acuerdo de ti. Porque vivimos juntos, viajamos por todo el mundo. Nos unía la profesión".
Con María, pedagoga de profesión, se casó en 2020 en una ceremonia íntima. Junto a ella ha pasado los últimos años de su vida y ha tenido una jubiliación plácida y sin sobresaltos. Se trasladó en 2018 a su pueblo natal, San Juan del Puerto, y allí vivió sus últimos años con su mujer y su perro Gala, un golden retriever a quien a menudo solía llamar Calma. Aunque, como él mismo confesó a su exmujer Joana Bonet, se consideraba un 'padre imperfecto', adoraba a sus dos hijas y compartía gran parte de su vida con ellas. En el libro que escribió Jesús Melgar -mano derecha de Quintero durante gran parte de su trayectoría- cuenta anécdotas de su personalidad como que utilizaba sus famosos fulares para ocultar sus arrugas y debido a su coquetería, que era muy supersticioso por lo que nunca viajaba los días 13 de cada mes y que tenía pánico a volar, llegando un día incluso a impedir que un avión despegase de Sevilla por ser de hélice y querer bajarse.
Fallece el periodista Jesús Quintero a los 82 años
El periodista también confesó que no siempre fue el periodismo su primera vocación, sino que su principal pasión siempre fue la actuación: "Soy un actor frustrado. Luego acabé en la radio, también a bordo de una roulot con la que recorrimos España. Una furgoneta extravagante y vagabunda. Radio Nacional, La Ser, Televisión Española, Canal Sur, etc. Son tantos sitios. He recorrido este país pueblo a pueblo, río a río. He visto a muchos enrollarse con la fama, la riqueza y el poder. Para mí, no tiene demasiado interés", así se lo contaba a Joana Bonet. El presentador encadenó varias depresiones hasta el punto de que influyó en su trabajo y tuvo que tomar fuerte medicación para poder seguir el ritmo, como el mismo confesó. Además, en 2006 sufrió un infarto que a punto estuvo de ser mortal.
Durante sus últimos años se decía que Jesús Quintero se encontraba dolido y frustrado por no haber podido despedir de su público como le hubiera gustado, además de que se encontraba en medio de varios problemas ecónomicos. En febrero de 2019 el presentador cumplió uno de sus sueños y creó su propia organización benéfica: La Fundación Jesús Quintero, un centro cultural que se convirtió en un proyecto muy especial a través del cual pretendía levantar un museo-documental en San Juan del Puerto de 2.000 metros cuadrados dónde se encuentra todo su archivo audiovisual.