Joan Roca se llevó anoche la medalla de bronce en los premios The Best Chef Awards, que se conceden de forma anual desde 2017 y que determinan una lista con los 100 mejores chefs del planeta. Este galardón reconoce la labor gastronómica que el cocinero llevo a cabo en su restaurante, El Celler de Can Roca, en el que también trabajan sus hermanos, Jordi y Josep Roca. El chef, de 58 años, llegó al Palacio de Cibeles de Madrid con su hija Marina, de 18 años, y ese fue, con total seguridad, su mejor premio porque la joven tuvo un gravísimo accidente de tráfico que la dejó 15 días en coma y más de un mes ingresada en la UCI del Hospital Josep Trueta de Girona. Afortunadamente, ya está totalmente recuperada. "La suerte nos ha sonreído con el accidente de mi hija porque el diagnóstico era muy duro, pero finalmente ha evolucionado favorablemente", declaró el chef catalán en una entrevista concedida a la Cadena Ser.
- ¿Cuál es la enfermedad que afecta a la voz del cocinero Jordi Roca?
El accidente de Marina inspiró a su tío Jordi Roca a la hora de crear nuevos platos. "Se despertó del coma justo cuando llegaron las mandarinas, y eso inspiró un postre llamado nube de mandarina, y luego un postre de cacao en el que el aguardiente del cacao vuela, vuelve y vive", explicó el pastelero en junio de 2021, durante la celebración de Madrid Fusión.
El accidente de tráfico de Marina se produjo a principios de 2021 y supuso un duro golpe para la familia. "Te llaman una tarde, y tu hija está camino del hospital, ha sufrido un grave accidente. El mundo se te hunde", contó Joan Roca en La Vanguardia. En ese momento, todo giraba entorno a la joven, que en aquel momento tenía 17 años. Tras una larga recuperación en la que necesitó la ayuda de los profesionales del Institut Gutmannde Badalona, especializado en la neurorrehabilitación, Marina volvió a la vida.
Joan Roca lleva 29 años casado con Anna Payet, que se encarga del Hotel Boutique Casa Cacao de El Celler de Can Roca, situado en un edificio catalogado de interés histórico en Plaça Catalunya de Gerona. El matrimonio tiene dos hijos, Marc, que está interesado en el mundo de la cocina y ha participado en algún programa de MasterChef junto a su padre, y Marina, que en 2017 participó en MasterChef Junior y recibió la visita de su abuela paterna, Montserrat Fontané.
Para el cocinero, su familia lo es todo y Anna no puede estar más orgullosa de sus dos hijos. A Marc le ha dado las gracias "por darme siempre la mano y estar siempre" y a Marina, a la que llama "guerrera", le ha dicho que su sonrisa es su luz y su felicidad.