Poco a poco va trascendiendo más información del robo con violencia que Aubameyang y su familia sufrieron en su propia casa en la madrugada del domingo al lunes, haciendo evidente la angustia que el jugador, su mujer y sus dos hijos, menores de edad, debieron de pasar. Si ayer informábamos que había renunciado a atención hospitalaria para no alarmar más a los niños, este miércoles el medio deportivo británico The athletic ha sacado a la luz su parte médico: tiene la mandíbula rota.
El futbolista recibió un brutal golpe con la culata de una escopeta cuando se dirigió a uno de los asaltantes. Alysha, la mujer de Aubameyang, habría intentado activar la alarma al ver a varios encapuchados y uno de ellos la detuvo, impidiendo que lo hiciera. Para evitar que le hiciera ningún daño a Alysha, el jugador del Barça se dirigió al asaltante y este le agredió en la cara con el arma que llevaba, rompiéndole la mandíbula.
Mientras tanto, los hijos del matrimonio vieron cómo estos hombres retenían a sus padres durante una hora, por lo que no es de extrañar que, una vez pasado lo peor, la familia haya querido marcharse de su casa e instalarse en un hotel. A las graves consecuencias desde el punto de vista emocional que una vivencia como esta ocasionaría en cualquier persona, en el caso de Aubameyang se pueden sumar otras a nivel profesional.
-Roban a punta de pistola y agreden al jugador del Barça Aubameyang en su casa de Castelldefels
La cuestión es que el Barça estaba negociando su traspaso al Chelsea y, aunque las conversaciones con el equipo británico no se habrían roto, podría dificultar la operación (o al menos cambiar las condiciones). El motivo es que la lesión tendrá al futbolista varios días de baja y podría, incluso, tener que estar sin jugar más de un mes si se somete a la operación quirúrgica que precisa.