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Hace unos meses, Luis Figo y su mujer, Helene Svedin, atravesaron una crisis matrimonial, tal y como informó ¡HOLA! en su momento. Pero el portugués y la modelo sueca, como también quedó reflejado en estas mismas páginas, demostraron que por encima de cualquier problema personal forman, junto a sus tres hijas, Daniela, Martina y Stella, una familia unida y feliz. Hoy, de nuevo, podemos comprobar que Figo y Helene siguen siendo un matrimonio unido.
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Tras haber pasado unos días inolvidables en las playas de la localidad portuguesa de el Algarve, como pusieron de manifiesto tanto el exjugador del Real Madrid como su mujer en las redes sociales, la pareja salió a cenar a un restaurante de La Moraleja, concretamente, el que regenta Rafael Dona, hijo de la bailaora Pastora Vega. Una romántica cita solo para dos que ni siquiera la lluvia de esa noche pudo estropear. Una vez que decidieron terminar la velada, Luis y Helene demostraron tener muy buena relación con el propietario del establecimiento, del que se despidieron muy afectuosamente.
Un verano diferente
Este ha sido un verano diferente para el deportista y su mujer, que han disfrutado de diferentes escapadas juntos, por separado o con sus hijos. A finales de julio, Luis Figo disfrutó de unas vacaciones sin Helene y con Stella, la menor de sus tres hijas. Días después, descubrimos que la exmodelo sueca se encontraba en Mallorca, y posteriormente, estuvieron separados por una distancia de casi siete mil kilómetros.
Mientras que Luis estaba en Catar, donde se encontró con otras figuras del fútbol, Helene había viajado a su Suecia natal con el resto de la familia, tanto con sus tres hijas, Daniela, Martina y Stella, como con los respectivos novios de las dos mayores, el modelo Beltrán Lozano y Luis Osorio, hijo del duque de Alburquerque y Blanca Suelves. Todos ellos pasaron unos días en Nordingrå, un pequeño pueblo situado junto al lago Vågsfjärden, a casi quinientos kilómetros al norte de Estocolmo. Helene y su familia pescaron, pasearon por los bosques y disfrutaron de juegos de mesa. Por su parte, Figo desconectó en la ciudad catarí de Doha y navegado por el golfo Pérsico.
Siempre muy discretos con su vida privada, a pesar del mencionado bache sentimental que atravesaron en invierno y que provocó que el exjugador de fútbol tuviera que abandonar temporalmente la casa familiar, estas imágenes ponen de manifiesto que la pareja está muy unida y disfrutando al máximo de esta nueva oportunidad.