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No están siendo momentos fáciles para Elena Tablada . El pasado 17 de agosto, poco después de confirmar ¡HOLA! su separación temporal, explicaba a través de sus redes sociales que había decidido “dar un pare” a su matrimonio con Javier Ungría, “para así poder respirar y ver en qué consiste realmente la felicidad”. Y en este tiempo que se han tomado para decidir qué rumbo tomarán sus vidas, la diseñadora puso rumbo a Ibiza, uno de sus destinos favoritos cada verano, donde se ha rodeado de amigos y donde hemos podido verla sonreír, pero también llorar, como muestran estas imágenes exclusivas.
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Como publicábamos en las páginas de nuestra revista, en una de sus reuniones con amigos en la playa, se la veía muy afectada en medio de una conversación y tuvo que parar para secarse las lágrimas. Hablaba con ellos visiblemente triste en un restaurante y recibía su apoyo, ya que sus círculo de amigos más cercano se ha convertido en uno de sus grandes apoyos.
También ha aprovechado para salir a navegar. A Elena le encanta el mar y ha disfrutado de la calma del Mediterráno para reflexionar, su vitamina sea como lo llama. Fue fotografiada a bordo de una embarcación, donde, pensativa y de nuevo dejando escapar alguna lágrima, veía el atardecer desde la cubierta. “Simplemente soltar, confiar y agradecer”, escribía en una de sus jornadas marineras, junto a una imagen en traje de baño.
Ella suele compartir en sus stories muchas frases y pensamientos positivos y los de estos últimos días, sabiendo cuál es la situación que atraviesa, adquieren un significado especial. “Abraza lo desconocido. Deja que todo se desarrolle naturalmente sin prestarle tanta atención. Confía en que todo lo que viene es perfecto para ti. El capítulo que estás escribiendo ahora, tendrá un título mucho más adelante”, eran las palabras que compartía el 24 de agosto. “Pronto llegará el día en que por fin verás que todo valió la pena. Cada noche sin dormir, cada decepción, cada frustración, cada lágrima. Pronto verás que todo resultó bien, que eres muy feliz”, fue la frase de sus stories el domingo 21.
Y esa felicidad no se sabe si llegará junto a Javier, como explicaba en sus redes, lo único que tiene claro es que para ella lo más importante son sus hijas. “Quien me conoce sabe que mis hijas son lo más importante que tengo en mi vida y si me veo en la posición de ponerlas en una balanza, siempre pesarán más ellas”, subrayaba sobre sus niñas: Ella, de doce años, de su relación con David Bisbal; y Camila, de dos años, de su matrimonio con Javier Ungría.
La diseñadora y el empresario, con quien contrajo matrimonio en 2018, con una ceremonia civil en Miami y otra religiosa en Cuba, aún no han tomado una decisión firme sobre su futuro como pareja y no han iniciado ningún trámite legal hasta la fecha. Llevan distanciados todo el verano, Elena ha pasado parte de sus vacaciones con las niñas en Miami, mientras que Javier también ha estado unos días con la pequeña Camila. El tiempo dirá cuál es la conclusión a la que llegan después de estos meses distanciados.