Stella Banderas, el descubrimiento del verano, en sus vacaciones en Italia con su novio, Eli Meyer

En los próximos días regresará a Málaga para reencontrarse con su padre, Antonio Banderas

25 de agosto de 2022 - 14:03 CEST25 ago 2022 - 14:03 CEST

Poco queda ya de la dulce niña rubia que se escondía entre los brazos de su padre. A sus casi veintiséis años, la hija de Antonio Banderas y Melanie Griffith deslumbra con su belleza y seguridad. “Tiene una opinión muy clara sobre las cosas”, asegura su padre, que no duda en confesar que se siente “muy reflejado en ella” y, cuando le preguntan si se parece más a él o a su madre, Melanie Griffith comenta: “Alguien dijo por ahí que era una mezcla de ambos, incluso físicamente. Yo creo que es así”.

A Stella del Carmen Banderas Griffith la vimos en España en junio. Tras los meses que pasó en Málaga el año pasado como segunda asistente de dirección de Antonio en el musical Company, voló desde Estados Unidos como estrella invitada del desfile de Dior en Sevilla. Y ahora, tras celebrar con su madre su sesenta y cinco cumpleaños en Los Ángeles, está de nuevo en Europa. En concreto, pasa unos días en Italia con su novio, Eli Meyer, hijo de Ronald Meyer, vicepresidente de NBC Universal y uno de los hombres más influyentes de Hollywood, y la filántropa Kelly Chapman.

En los próximos días regresará a Málaga para reencontrarse con su padre, Antonio Banderas, con quien trabaja como segunda asistente de dirección

LAP_BGUK_2440855_030-Collage-U65384307220PxJ — Stella, espectacular, en las playas de la costa Amalfitana con su novio, Eli Meyer, a quien presentó oficialmente hace tres años. La hija de Antonio y Melanie, que lleva tatuado Griffith en su brazo derecho, cumplirá veintiséis años el 24 de septiembre.

Juntos los vimos por primera vez en el verano de 2019 y, ahora, disfrutando de sus vacaciones en Nerano, cerca de Positano, en la costa Amalfitana, donde Stella ha deslumbrado en la playa con un bikini negro. En pocos días se reencontrará en Málaga con su padre, que también sopló el 10 de agosto las velas de su sesenta y dos cumpleaños. Antonio confía en su hija y en su criterio para sus proyectos, así que es más que probable que no solo se trate de una visita familiar, sino que padre e hija vuelvan a trabajar juntos en los nuevos espectáculos que prepara con su compañía. “Es una niña, ahora ya una mujer, con mucha personalidad. Tiene una opinión muy clara sobre las cosas, también del mundo del espectáculo, porque se ha criado ahí”, decía Antonio hace unos días. “Me sirve mucho tenerla al lado”.

Licenciada en Estudios Narrativos por la Universidad del Sur de California, aunque se ha introducido en el mundo de la actuación, prefiere estar detrás de la cámara: “Me gusta la idea de probar un millón de cosas diferentes antes de abandonar la veintena. Por ahora quiero continuar construyendo mi compañía de fragancias, escribir y dirigir más y seguir explorando diferentes campos”, decía Stella en Elle el pasado otoño.