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No cabe duda de que Ana Boyer y Fernando Verdasco son una pareja de lo más viajera. Al igual que siempre la hermana pequeña de Tamara Falcó ha hecho las maletas junto a sus dos hijos: Miguel (3) y Mateo (1) para seguir los pasos del tenista en sus muchos compromisos laborales alrededor del mundo. Después de una fugaz visita a México: el deportista ha participado junto a su amigo Feliciano López en el torneo de los Cabos, donde, por desgracia, cayeron eliminados en la primera ronda, toda la familia ha puesto rumbo hasta Chicago, donde se está celebrando el ATP Challenger. Una oportunidad de oro, que, como en otras ocasiones, el matrimonio ha aprovechado para hacer turismo y descubrir algunos de los tesoros de la ciudad del jazz.
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Hablamos con Fernando Verdasco: del parecido de sus hijos a su futura retirada
Una visita que ha servido al dos veces campeón de España para cumplir una de las ilusiones que más anheló durante su infancia. Ha sido el propio yerno de Isabel Presyler quien ha explicado en sus perfiles sociales el gran significado que tiene para él visitar este lugar: "Desde que era un niño veía los partidos de Michael Jordan y los Chicago Bulls y quería venir a conocer esta ciudad. 20 años después he podido conocerla y me ha encantado. Gracias a todos los que lo habéis hecho posible. Agradecido. Los sueños nunca mueren". Una bonita reflexión sobre las numerosas puertas que le sigue abriendo su profesión a pesar de haber atravesado dos años muy complicados que han estado marcados por las lesiones.
En una entrevista en exclusiva con ¡HOLA! Ana confesó que Estados Unidos guarda un lugar especial en su corazón, puesto que fue donde se enteró de que estaba embarazada de su primogénito, por lo que siempre está encantada de volver. Su vida ha cambiado mucho en estos 10 años de relación, pero su compromiso por llevar su amor allá por donde va sigue intacto. Una década que le ha brindado grandes cosas en el terreno personal, puesto que también le ha servido para forjar una bonita amistad con la otra gran dama del tenis, Sandra Gago. De la misma manera, este verano ha habido tiempo para la diversión y los reencuentros en España, puesto que han sido invitados a las bodas de sus respectivos primos: Alvaro Castillejo por parte de Ana; y Laura Verdasco por parte de Fernando. Dos eventos en los que la hija de Miguel Boyer ha hecho alarde de su buen gusto y estilo con dos looks de lo más acertados.
Ana Boyer y Fernando, en la gran boda que ha reunido a la familia Verdasco
Una piña allá donde van
A pesar de que viajar con niños es una aventura que no siempre resulta sencilla, los pequeños de la casa disfrutan tanto o más que sus padres con estas escapadas. El matrimonio ya explicó que habían tomado la decisión de ser algo nómadas, aunque su residencia habitual la tienen fijada en Doha, para así aprovechar el máximo tiempo posible juntos. Por ello, Miguel y Mateo son niños todoterreno y están perfectamente acostumbrados a pasar largas temporadas fuera de casa conociendo nuevos rincones y su cultura. El amuleto de la suerte más importante para el tenista en todas las pistas, que, además, como su orgulloso progenitor, se han convertido en unos aficionados de excepción del tenis compartiendo la pasión con Fernando por el universo de la raqueta.