Un bonito y colorido vestido es al verano como ir al mar y disfrutar del sol en la temporada estival. Y quién mejor para demostrarlo nuevamente que Sara Carbonero y su nuevo look bohemio para dar un paseo por las calles de Madrid junto a su novio, Nacho Taboada. Recién llegada de las playas de Cádiz, donde ha estado con sus hijos y con su buena amiga, Raquel Perera, la periodista manchega elegía para el reencuentro un favorecedor vestido fluido de lino, cuello redondo, escote de pico y bajo asimétrico.
Se trata en concreto del modelo Lavezzi de la firma Masscob, de tono mostaza, perfecto para resaltar su bronceado, y tipo caftan, pero al que la presentadora del programa radiofónico Que siga el baile, le ha puesto su sello personal con un cinturón de cuero con tachuelas, alpargatas de cuña y un bolso de flecos. Pulseras, cadenas de distintos largos y abalorios completaban el outfit de la mejor embajadora del estilo boho-chic.
Nos se había fotografiado a Sara y Nacho desde finales de junio, pero eso no significa que su relación no siga adelante, y prueba de ello son estas imágenes, como decíamos, tomadas en Madrid, tras volver de pasar unos días en las playas gaditanas con Martín, de ocho años, y Lucas, de seis. No se sabe si el músico la habría visitado en Andalucía, pero podría ser que antes de finalizar agosto, en los días que los pequeños de Sara estén con su padre, Iker Casillas, hagan alguna escapada en pareja. La locutora tiene vacaciones hasta que regrese después de verano con nueva temporada de su programa en Radio Marca, y los niños también vuelvan a las aulas para afrontar el nuevo curso. Además, de seguir trabajando en las nuevas colecciones de la firma que tiene con su amiga Isabel Jiménez, Slowlove, con la que seguro que también compartirá algunos días estivales.
Por su parte, Nacho Taboada, que es licenciado en Comunicación Audiovisual, está volcado en su carrera musical y también tiene un centro de grabación y posproducción audiovisual llamado Santa Ana Studios. Comparte con ella su pasión por la comunicación y cómo no, por la música y ahora él es quien está poniendo acordes a la banda sonora de la vida de la periodista.