El testamento de Rocío Jurado, que se firmó el 17 de septiembre de 2004 justo después de anunciar que padecía cáncer de páncreas, trajo consigo multitud de enfrentamientos familiares. Años después de la repartición, además de conocerse la existencia de otras voluntades no oficiales que saldrán a la luz en El nombre de Rocío, la hija de la artista ha querido dejar claro que nadie de su entorno sabía de la existencia del mismo ni que Ana Iglesias había sido elegida como albacea. Y a pesar de que algunos de ellos, como Rosa Benito, han dicho que conocían la intención de la cantante de hacer algunos cambios de última hora, la que fuera presentadora de Hable con ellas ha confesado que nadie tenía conocimiento del testamento. "Es fuerte porque ninguno sabía que estaba hecho. No se habla de ello en ningún caso", ha dicho Rocío, que ha asegurado también que es imposible que su madre dijera a cualquiera de ellos que sentía que había hecho algo mal respecto a la herencia .
Analizamos las claves del testamento de Rocío Jurado con un experto
Rocío Carrasco ha explicado que cree que es posible que su madre supiera que no había hecho bien dos cosas sobre el testamento: "Una podría ser que supiera que había hecho mal dejándole a toda esa jauría lo que les dejó y otra haber vivido bajo el yugo de todos ellos. Si algo no hizo bien mi madre fue permitirle a todos lo que les permitió", ha dicho la hija de Rocío Jurado. Además, la colaboradora de Mediaset ha expresado que en una de esas conversaciones en las que 'la más grande' le preguntaba sobre las cosas de la herencia y el testamento, le dijo a su madre que le dejara de insistir con todos esos temas porque hablar sobre ello significaba que aceptaba que se iba a morir. "En ese momento lo que hubiera o dejaba de haber me importaba tres pimientos. Me daba igual lo que les quisiera dejar a las hermanitas de la caridad, lo que sí es cierto es que yo en una ocasión le pedí que no me dejara problemas", ha añadido la mujer de Fidel Albiac.
Habiéndole dejado claro a su madre que no quería saber absolutamente nada sobre la herencia, Rocío ha aclarado que jamás nadie tuvo, al menos delante de ella, algún tipo de conversación sobre las últimas voluntades de la artista. "No quería tenerlas yo, iba a permitir que las tuviera nadie. Cuando no estuviera yo que hicieran lo que quisieran, pero dudo mucho que se hablara de ello porque ni Rosa ni Amador sabían que existía un testamento, ni uno ni otro", ha dicho la colaboradora de Mediaset, quien también ha comentado que al final muchas de las cosas de las que hablan ahora sus familiares en los platós son creaciones que han surgido con el tiempo cuando han ido sabiendo los diferentes datos. "Después de 14 años con toda la información se construyen una historia que es mentira. Todo se cae por su propio peso porque ella se fue al día siguiente con Ana Iglesias sin decírselo a nadie", ha añadido.
El testamento de Rocío Jurado vuelve a sembrar el caos entre los Mohedano
A Rocío Carrasco además le sorprende mucho que sus familiares digan que sabían de la existencia del testamento porque de ser así cree que su tía Gloria la hubiera acompañado, como hacía con todos los temas importantes. Pero no solo eso, la protagonista de En el nombre de Rocío, que ha dejado claro que su madre no quería que su familia supiera nada sobre la herencia, ha revelado que Ana Iglesias le dijo que tales conversaciones con Rosa u otros familiares sobre las voluntades de su madre nunca existieron.