El mundo de la interpretación está de luto ya que ha perdido este 8 de agosto a una de sus grandes estrellas: Olivia Newton John. La cantante y actriz australiana, que tenía 73 años y una dilatada trayectoria profesional repleta de éxitos, ha fallecido tras ser diagnosticada de cáncer en tres ocasiones. Ha sido su esposo, John Easterling, el que ha dado a conocer la triste noticia en un comunicado en el que se puede leer: "Olivia Newton-John falleció pacíficamente en su rancho en el sur de California esta mañana, rodeada de familiares y amigos. Les pedimos a todos que respeten la privacidad de la familia durante este momento tan difícil".
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En el texto, sus seres queridos han recordado a la emblemática intérprete como "un símbolo de triunfos y esperanza durante más de 30 años compartiendo su viaje con el cáncer de mama". Tanto su marido como su hija, sus hermanos y sobrinos, han recalcado que "su inspiración curativa y su experiencia pionera con la medicina vegetal continúan con el Fondo de la Fundación Olivia Newton-John, dedicado a la investigación de la medicina vegetal y el cáncer". Es por eso que, en lugar de flores, la familia pide que se hagan donaciones en su memoria a la organización que lleva su nombre.
Hace justo cinco años se supo que Olivia había sido diagnosticada nuevamente de cáncer de mama en etapa cuatro con metástasis. La actriz, que ya superó la enfermedad en 1992 y en 2013 (la segunda vez lo pasó en secreto), confesó en el programa de televisión australiano 60 minutes que no sabía lo que le queda de vida. "Para mí, psicológicamente, es mejor no tener ni idea de lo que me espera o cuánto vivió la última persona que tuvo lo que yo tengo", aseguraba. Además, reconoció sentirse afortunada de seguir adelante y dijo que cada día era un regalo. A pesar de sus problemas de salud ella siempre siguió intentando recaudar fondos para la investigación y una de las iniciativas fue sacar a subasta algunas prendas personales como el look que llevó al interpretar a Sandy Olsson, el papel que indudablemente cambió su vida.
Durante esta complicada etapa ha contado con el completo apoyo de su segundo marido, el magnate y gurú de la salud John Easterling. En verano de 2008 se casaron dos veces en la más absoluta intimidad. La primera fue en la cima de una montaña en plena selva de Perú y la segunda en una playa de Florida. Se habían conocido quince años antes por unos amigos comunes, pero no fue hasta un año antes de la boda cuando comenzaron su relación al darse cuenta de que estaban hechos el uno para el otro. Olivia solía decir que el fundador de Amazon Herb Company le hacía ser "la mujer más feliz del mundo".