Isa Hernáez es menudita, pero escultural. No es modelo, pero sabe posar como una auténtica top, y con sus profundos ojos verdes mira a la cámara con decisión. Prefiere permanecer alejada del foco mediático si no es estrictamente por temas de trabajo. Pero no puede evitar que su nombre vaya ligado al de uno de nuestros deportistas más populares y queridos, Carlos Sainz, Jr. El último héroe español de la Fórmula 1 y la bella periodista mantienen un sólido noviazgo desde hace cinco años, aunque siempre han intentado llevar su relación de la manera más discreta posible y mantenerla en un segundo plano respecto a sus respectivas profesiones.
Con luz propia
Emprendedora e inquieta, con su buen gusto y un estilo muy fresco, Isa se ha hecho un hueco en el podio de la moda, donde brilla con luz propia. Después de una etapa inmersa en el mundo de la comunicación de moda (trabajó durante cuatro años en el departamento de comunicación y relaciones públicas de Scalpers) y de triunfar como referente en las redes sociales, afronta una nueva aventura como diseñadora. Así nos lo descubre en este reportaje, en el que nos habla de sus inquietudes y ejerce de modelo de excepción con sus propias creaciones.
“Es la primera vez que diseño y ha sido divertidísimo, me apetecía un montón, he disfrutado cada minuto del proceso”
—Isa, ¿qué nos puedes contar de tu nuevo proyecto?
—Acabo de lanzar una colección cápsula para verano. Son cinco prendas y, sobre todo, pensando en producir de una manera sostenible, lo he hecho con una start up española cuyo lema es “de la fábrica a tu casa”, con lo que se produce la ropa sin contar con intermediarios. Mi idea era hacer piezas atemporales, de calidad muy buena, que te vayan a valer toda la vida, pensando en fondos de armario más que en ropa de supertendencia. Es verdad que sí que hay un top de color naranja, que ahora está super de moda, pero, en general, son prendas de fondo de armario.
—¿Y te has involucrado en todo el proceso, las has diseñado tú misma?
—Sí, ha sido divertidísimo, la verdad. Es la primera vez que lo hago, me apetecía un montón y he disfrutado cada minuto del proceso. Es verdad que ha sido un poco locura y bastante trabajo. Yo, al principio, no tenía ni idea de en qué me estaba metiendo, no sabía que iba a ser tan duro, pero, a la vez, lo he disfrutado un montón. Y me encanta, estoy muy contenta con el resultado. Las cinco prendas ya están disponibles bajo pedido, a través de la web de esta empresa, fabbric.com, y ahí está el apartado de la colección diseñada por mí.
“Soy trabajadora, organizada y muy familiar, con valores tradicionales... Y no me enfado nunca, soy supertranquila”
—Evidentemente, no podías permanecer ajena al concepto de sostenibilidad, y menos en tu lanzamiento como diseñadora.
—Claro, porque creo que, hoy en día, hay ya tantas marcas produciendo en masa desde hace tantos años que, a partir de ahora, todo tiene que ser así. Trabajamos con pre order, es decir, en lugar de producir mil unidades de una prenda, producimos en función de lo que nos han pedido. De esta manera, evitas, primero, que se genere stock de más y que no se venda, y segundo, estableces un diálogo con el consumidor y puedes saber lo que va a gustar y lo que no. Por ejemplo, tal vez planteas un color y nadie lo ha pedido, pues no lo fabricas.
“Mi mayor virtud diría que es el orden; ayuda mucho cuando tienes varios proyectos, y mi mayor defecto, creo que también el orden, porque si me salgo de él, me agobio”
La norma de ‘las treinta veces’
—¿La filosofía de sostenibilidad también la aplicas en tu propio armario? ¿De qué manera?
—Sí, sobre todo, desde la cuarentena. Me di cuenta de que tenía ropa que no usaba casi nada. Ahora sigo la norma de “las treinta veces” antes de comprar algo. Si creo que no me lo voy a poner más de treinta veces, no merece la pena comprarlo.
—¿Dirías que ahora eres menos consumista que antes o nunca lo has sido?
—Nunca lo he sido. No sigo las tendencias al pie de la letra, aunque sí me gusta estar al día.
—Háblanos de tu estilo, ¿cómo lo describirías?
—No diría que tengo un estilo definido, pero sí que me gusta ir cómoda. Apuesto por prendas de fondo de armario como una buena camisa, un traje, unos vaqueros que sienten muy bien…
—Por lo tanto, tu colección está basada en tu propio estilo.
—Completamente, son cinco prendas basadas en mi estilo. Dos cárdigans superversátiles, un vestido negro, un pantalón de lino blanco y un kimono verde, que puede servir tanto para el día como para la noche, solo cambiando los complementos.
“Nunca he sido consumista. No sigo las tendencias al pie de la letra, aunque sí me gusta estar al día”, afirma Isa, que en su armario apuesta también por la filosofía de la sostenibilidad
—¿Cuáles son tus imprescindibles de verano en la ciudad?
—En verano me gusta mucho combinar vestidos y sandalias planas. Las camisas de lino también son imprescindibles para mí.
—¿Y lo que no puede faltar en tu maleta de vacaciones?
—Un capazo, un sombrero, un kimono y unas gafas de sol.
—Estudiaste Periodismo, pero siempre has estado muy vinculada a la moda. ¿Lanzar tu propia colección era el paso que te faltaba por dar?
—Cada año, estoy dando un paso nuevo que no sabía que iba a dar y que no sabía que me iba a apetecer. Hace nada he lanzado un pódcast, también de moda. Es verdad que en la universidad me gustaba mucho la radio y se me daba muy bien; tenía un programita con tres amigas. A raíz de la cuarentena, que escuché muchos pódcast en inglés, pensé que no había nada en español de moda que me gustara, que me apeteciera escuchar, y me dije “pues es el momento”. Lo lancé en noviembre pasado con una amiga y va muy bien. Tenemos ya unos diez mil oyentes semanales, nos paran por la calle, porque a la gente que nos escucha le encanta el contenido. Ahora hemos parado durante el verano, pero estoy deseando que llegue septiembre para retomarlo.
“Me gusta mucho la radio. En la universidad hacía un programita con tres amigas y se me daba muy bien. Hace nada he lanzado un pódcast de moda y está gustando mucho”
—¿Qué contenidos abordáis en el pódcast?
—De todo. La idea era empezar hablando solo de moda, pero en realidad es de estilo de vida. Hemos invitado a diseñadores, a un nutricionista, a un perfumista…
‘Algo nuevo se me ocurrirá, seguro’
—También te has convertido en todo un referente en las redes sociales con diferentes proyectos.
—Sí, tenemos la cuenta @madrileniansinmadrid, que también me surgió por amor a la moda. Una amiga y yo seguíamos la cuenta @parisiansinparis, que saca fotos de street style anónimas, y pensamos que en Madrid no había ninguna y que había que hacerla. Pidiendo la cuenta en el restaurante, ya la creamos. Nos fuimos a tomar un café con otras amigas y en la cola hicimos la primera foto por detrás, muy nerviosas, y en tres meses, de repente, ya teníamos diez mil seguidores, y la verdad es que crece un montón. Ahora va casi por los ciento diez mil seguidores. Creo que es una manera muy fresca de dar contenido digital de moda, porque, al final, el contenido de Instagram siempre es muy posado y esto rompe por completo, porque son fotos que pillan desprevenida a la gente por la calle, que llevan puesto lo que les apetece, supernatural... Yo creo que por eso está funcionando tan bien.
La guapa periodista lleva cinco años de sólido y discreto noviazgo con Carlos Sainz, Jr., el nuevo héroe español de la Fórmula 1
—No paras, estás en un momento increíble.
—Sí, la verdad es que me van surgiendo estos proyectos y los estoy disfrutando un montón. El año que viene se me ocurrirá algo nuevo, seguro.
—¿Piensas sacar otra colección?, ¿ya estás pensando en la próxima?
—Tengo alguna idea de algo que quiero hacer, de momento no tengo nada cerrado, pero sí, seguro, porque me gusta mucho, la verdad.
—¿Cómo te defines a ti misma en pocas palabras?
—Trabajadora, organizada y muy familiar, con valores tradicionales.
—¿Cuál dirías que es tu mayor virtud?
—¡Qué difícil! No sé, creo que ser organizada me ayuda mucho, sobre todo, cuando tienes varios proyectos en marcha, el orden es fundamental, en especial, el orden mental.
—¿Y tu mayor defecto?
—Pues…, quizá, el orden también, porque a veces cuesta salirse de ese orden; si me salgo, me agobio.
—¿Te enfadas si alguien a tu alrededor es desordenado?
—No, que va, yo no me enfado nunca. Soy supertranquila.
—La moda es tu pasión, pero, al margen de tu trabajo, ¿qué otras pasiones tienes?
—Me gusta mucho la cocina, sobre todo, disfruto mucho preparando postres.
—Y viajar también, ¿no?
—Sí, me gusta mucho viajar. Siempre que he tenido la oportunidad, porque tenía ahorros o una paga extra, me hacía un viaje con mis amigas. La verdad es que es algo que me encanta.
—¿Cuál es el último lugar al que has viajado que te ha fascinado?
—He estado en la boda de una de mis mejores amigas en Aix-en-Provence, en Francia, y el pueblo me ha enamorado, me pareció precioso, muy tranquilo, tenía muchas tiendecitas monas... Cezanne es de allí, o sea que también tiene una parte cultural muy importante. Además, la boda fue superemotiva, yo creo que eso también ayudó.
—Desde pequeña vas de vacaciones a Mallorca. ¿Qué tienen de especial para ti los veranos allí?
—En Mallorca desconecto y recargo pilas. Me encanta ir al mercado, explorar la isla y pasar tiempo con mi familia y amigos.
—¿Hay algo que te haya hecho sentirte especialmente orgullosa últimamente?
—Me siento superorgullosa de cómo me he ido superando. La verdad es que voy con tantas cosas que todavía no me he podido parar a pensar, supongo que cuando me vaya de vacaciones, en unos días, podré parar y asimilar todo y ver un poco este año con perspectiva. Pero la verdad es que estoy muy contenta con todo lo que tengo y con ganas de más.
—En estos momentos, ¿cuál es tu mayor ilusión, lo que más feliz te hace?
—Estoy muy ilusionada con el pódcast, como te decía, lo retomaremos en septiembre. Tengo muchas ganas de volver.