La semana pasada, rodeado del mar y con una radiante sonrisa, Julio Iglesias Jr. protagonizaba una entrevista donde habló desde el corazón sobre los diferentes aspectos de su vida. Después de superar un largo proceso de divorcio el año pasado con la que fue su mujer durante casi veinte años, Charisse Verhaert, el cantante se encuentra viviendo un momento muy feliz actualmente y habla con ilusión de su nuevo proyecto musical: después del verano, Julio presentará su próximo disco, titulado Under the covers.
En su conversación con ¡HOLA!, el hijo de Isabel Preysler y Julio Iglesias mostró, además, otras facetas de sí mismo que no conocíamos. La revelación más sorprendente es que ha confesado ser hiperactivo. “Me cuesta mucho sentarme a ver una película o una serie de televisión. Nunca en vida he visto una serie. Tengo que moverme”.
Después de esta confesión, llegamos a descubrir un poco más de la personalidad de Julio, quien también presumía de ser un hombre muy polifacético: “Me gusta construir y arreglar cosas. Me gusta desmontar un coche y armarlo. Mis fans no saben que soy jardinero, fontanero, electricista, que limpio yo mi casa de arriba abajo”. Junto a estas peculiares aficiones, también entra dentro de sus hobbies el deporte, especialmente los deportes acuáticos, los cuales siempre practica cuando se refugia en su idílica vivienda de los Cayos de Florida.
No cabe duda de que Julio es una persona llena de vida y energía y necesita transmitir esa vitalidad a los que están a su alrededor. Prueba de ello es el inolvidable momento que protagonizó en la boda de su primo, Álvaro Castillejo , cuando en medio del banquete cogió un micrófono y dedicó unas canciones a los novios. Tal fue la emoción que los invitados se levantaron de sus sillas y se unieron al cantante, inmortalizando uno de los mejores momentos de aquel gran día.