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Siempre será recordado por sus trabajos de actor en series como Los Serrano o Física o química. Pero tampoco hay que olvidar que Adrián Rodríguez comenzó su carrera, con solo diez años cantando en Menudas estrellas. De hecho, ganó el concurso que presentaba Bertín Osborne. Ahora el artista barcelonés retoma esa faceta de cantante y lo hace junto a Susy G, su novia. Juntos acaban de sacar la canción Only You.
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“Últimamente, todo lo que se escucha es reggaeton y trap, así que es algo como fresco y diferente”, nos cuenta Susy, que ha dejado su carrera de actriz de cine para adultos por amor. “Me encanta hacer todo con él, así que trabajar y grabar esta canción ha sido una experiencia muy bonita”, nos añade sobre la que es su pareja desde hace menos de un año. A pesar de haber iniciado la relación hace poco tiempo, los dos la están viviendo de la forma más intensa. A todos los niveles.
Además de iniciar un nuevo proyecto musical que piensan continuar, Adrián también acaba de pedirle matrimonio a Susy G. Ahora el artista nos desvela a ¡HOLA! los detalles de su boda, además de hablar su paso por las series más famosas de la televisión española y confesar cómo es su trato actual con sus antiguos compañeros de la pequeña pantalla. Adrián también aborda los momentos más difíciles de su vida en su entrevista más reveladora: las adicciones que sufrió en el pasado y cómo ha logrado superarlas.
—Adrián, ¿cómo ha surgido esta colaboración musical con Susy?
—Only You nace a raíz de nuestra historia de amor. Llevamos once meses juntos y, aparte de ser actores, nos hemos dedicado paralelamente al mundo de la música. Tanto ella como yo hemos grabado cosas, así que hemos decidido hacer algo juntos en la música. Nos hace mucha ilusión. También nos gusta trabajar juntos, siendo pareja. Me siento muy afortunado de trabajar con mi futura mujer.
—¿Ha sido fácil grabar esta canción o la confianza lo ha complicado en algún momento?
—Ha sido muy fácil porque nuestra relación ha fluido siempre y eso se ha reflejado a la hora de hacer la canción. Al estar tan compenetrados y tener tanta complicidad, ha sido muy guay. Al final, hemos hecho lo que a nosotros nos gustaba. Sobre el estilo de la canción, hemos buscado cosas que a Susy le gustaban y otras que me gustaran a mí. Only you es esa fusión. Está producida por uno de los grandes de este país, que es Austin Music, que ha sido productor de Juan Magán durante mucho tiempo y de éxitos como Atrévete, de Yago Roche. Decidimos contar con él porque era el sonido que buscábamos, abrir el mercado y hacernos un poco más internacionales.
—¿Qué respuesta estáis recibiendo?
—Muy buena, aunque la acabamos de sacar hace poquito. Nuestro entorno está muy contento, porque la música y el videoclip lo hemos hecho nosotros, desde cero y sin discográfica detrás. Queremos que sea el primer capítulo de algo que hemos creado entre ella y yo. Esto es el principio de un proyecto que queremos que sea a largo plazo. Ya estamos trabajando en otra canción con el productor.
—Habrá quien se sorprenda de que cantes, porque es más conocida tu faceta de actor, pero lo cierto es que comenzaste en el espectáculo cantando, cuando eras sólo un niño.
—Sí, correcto. Al final, la interpretación me ha hecho más conocido. El hecho de participar en series como Los Serrano o Física ha conseguido que tenga más repercusión como actor, pero siempre he cantado y he estado más ligado al mundo de la música. De hecho, siempre me he considerado más cantante que actor. Pero, bueno, la vida es como es y el público es que el elige. Pero me gusta tanto la música y subirme a un escenario… Y ahora hacerlo con mi mujer es doble placer.
—Como cantante, te haces llamar ‘El Hispano’ ¿De dónde viene ese alias?
—De la película Gladiator, que al personaje le llaman El Hispano. Luego descubrí todo lo que era la antigua Hispania. Los guerreros hispanos tenían un lema que era: “Lucha, triunfo, gloria”. Ese lema se me quedó grabado y me tatué las iniciales en la espalda. También ese nombre es para diferenciar un poco la faceta de actor de la música.
—Only You refleja el buen momento que atraviesas con Susy, con la que te vas a casar.
—Sí. Puedo decir que ahora mismo me ha llegado así y estoy superfeliz que haya sido por amor, porque, sin amor, estaríamos endemoniados. El amor cura y el amor hace todo. Me hace sentir en el mejor momento de mi vida, emocional y sentimentalmente. Además, ahora construyendo esto, un trabajo. Esto es un proyecto más, como su fuera nuestro niño. Desde el primer momento, está siendo muy intenso. Nos enamoramos a la vez y fue muy guay.
—Dices que lleváis once meses juntos.
—Sí. No llevamos ni un año (ríe).
—Entonces, ¿le pediste matrimonio después de estar poco más de siete meses de relación?
—Sí, llevábamos muy poquito (ríe).
—¿Cuál fue la reacción de Susy al pedirle que se casara contigo y llevando poco tiempo?
—Llevamos poco tiempo, pero lo tenemos claro… Tenemos vidas tan similares, a la hora de saber, conocer y de haber tenido nuestro pasado. Nos comprendemos y hemos visto que lo principal es que, antes de nada, somos amigos. Luego, nos amamos infinitamente. Al tener este tipo de vida, tenemos las cosas más claras y eso hace que haya fluido todo más rápido.
—¿Cómo fue la pedida de mano?
—En República Dominicana, en una cena que organizó ella.
—¿Te arrodillaste?
—Sí (ríe).
—Entonces, eres un romanticón.
—Sí, mucho. Soy de la vieja escuela (ríe).
—¿Ya tenéis elegida la fecha y el lugar para vuestra boda?
—Queremos casarnos en septiembre 2023, aunque Susy la quiere acelerar. La boda será en Barcelona porque los dos somos de allí.
—¿Cómo la conociste?
—Yo ya sabía quién era, por su carrera. Evidentemente, detrás de todo eso, también hay una vida. Entonces, nos conocimos a través una amiga que estaba en una discoteca. Le dije que quería conocer a Susy, que me gustaba físicamente, pero estaba seguro que me iba a llevar bien con ella. Susy me llamaba la atención, indendientemente de lo físico y todo lo que pueda representar ella. Yo sabía que, dentro de ese físico increíble, había una persona maravillosa. Es así. Es una de las mejores personas que he conocido en mi vida y, encima, tengo la suerte de que va a ser mi mujer.
—¿Qué destacarías de su personalidad?
—La manera que tiene de hacer las cosas, el cariño que le pone a las cosas y la ilusión que tiene por vivir, que muchas veces yo había perdido por los palos que me he llevado por mi culpa. Las ganas y la ilusión… Su personalidad… Es súper, superempática. Me cuida mucho, está siempre conmigo, es muy cariñosa… Es como yo. Puedo decir, al cien por cien, que es mi alma gemela. Hay gente que no llega a sentir eso nunca. Es flipante. Luego, nos hemos enamorado de una manera… Muchas parejas van con mucha táctica. Algunas no contestan para que se rayen o sufran por mí. Pero los dos hemos ido a la vez. Yo no he tenido que hacer de nadie. Con otras relaciones, en algún momento he pensado: ‘Esta persona está conmigo por quien soy’. Entonces, no hay ningún tipo de interés entre ella y yo. Yo sólo quiero cuidarla y amarla, hasta el día que me muera.
—Has pasado unos años difíciles. Sorprende que, después de participar en series como Los Serrano y Física o química, tuvieras problemas para encontrar trabajo. De hecho, tuviste que dejar el piso y vender tu coche.
—Sí, efectivamente. También pasé una época en la que me enganché a la fiesta y estaba un poco disperso. Después de mi abandono de Supervivientes, caí en una depresión y eso se juntó con la adicción a la fiesta. No te voy a decir adicción a un tipo de droga, porque no procede, pero sí me pasé y me perdí. Fueron momentos muy duros, porque tampoco me encontraba en el amor y fue una debacle. Además, tenía una deuda enorme.
—Con Hacienda, ¿verdad?
—Sí, cuarenta mil euros.
—De hecho, participaste en Supervivientes por esa deuda.
—Sí. Bueno, se puede decir que sí y que no. Participé en Supervivientes porque era una oportunidad y me apetecía, pero yo no estaba a lo que tenía que estar. Estaba más pendiente de lo que ocurría en España, de las deudas y porque no me gestioné muy bien en su momento. Ya no me oculto, yo he vivido toda la vida como un sibarita. De comer todos los días muy bien, entrenar y estar a tope… Si no estaba bien y le sumas que no comía, no fumaba… Imagínate. A raíz de eso, me encontré muy mal y necesité un tiempo de retiro espiritual. Allí estuve tres meses.
—¿Retiro espiritual?
—Un retiro real… Fue en una masía, en un sitio para desconectar, encontrarme a mí mismo y dejar los malos hábitos que yo tenía en ese momento. Entonces, salí del centro hace ya un año y pico.
—Entiendo que esas adicciones están superadas.
—Sí. Correcto.
—¿Te arrepientes de haber participado en Supervivientes?
—Creo que sí, pero porque no era el momento. Me dicen de ir ahora y flipas, pero entonces no estaba en un buen momento. Encima, adelantaron la edición y no tuve tiempo ni de prepararme. Me pilló en bragas y en medio de una ruptura. Además, había grabado dos series ese año y estaba agotado mentalmente. Fui a Supervivientes viéndolo como oportunidad y terminó siendo mi peor pesadilla. Hay días que aún sigo arrastrando. Una persona que siempre ha dado la talla y siempre ha dado la altura… Que, de repente, abandone un reality… No mola.
—Como comentábamos antes, comenzaste tu carrera en la canción y siendo un niño participaste en Lluvia de estrellas con sólo diez años. ¿Qué recuerdos tienes?
—Recuerdo a Bertín. Hace no mucho le vi y me acerqué para decirle si se acordaba de ese niño que ganó la edición… Y se acordaba. Tengo recuerdos muy bonitos, pero lo recuerdo como un sueño. Cuando gané el concurso, me acuerdo de ir con un papel y boli, para firmar… Ahora ha cambiado todo tanto en la industria y en la vida…
—En Lluvia de estrellas coincidiste con la actriz Elena Rivera.
—Sí, ella quedó en cuarta posición.
—¿Mantienes contacto con ella?
—No. Me llevo muy bien con su hermano.
—Después trabajaste en Los Serrano, que fue tu trampolín definitivo. ¿Qué recuerdas de esa etapa?
—Recuerdo que era un caos. Fue un boom. Date cuenta que todavía no existía Netflix ni nada. Me acuerdo que la gente se iba a casa porque quería grabar Los Serrano en vídeo. Luego, Globomedia lanzó el grupo Santa Justa Klan, en pleno apogeo de la serie… Imagínate la repercusión que tuvimos. Fuimos doble platino en su momento. Es fácil de decirlo, pero, cuando empezaba el apogeo de la piratería, vendimos 260.000 copias.
—¿Te resultaba fácil trabajar siendo niño en una serie de éxito? ¿Cómo gestionaste la fama cuando eras pequeño?
—Cuando eres joven, no eres consciente de todo. Entonces, a medida que he ido creciendo, es cuando me he dado cuenta del boom. Siempre me he visto como un chavalito de barrio, normal y corriente, así que verme en todo eso… Ha sido como un sueño, una película.
—Ahora la serie está viéndose en plataformas. ¿Qué te llama la atención y cuál es la respuesta que te llega?
—La mayoría de la gente me dice que estoy supercambiado. ¿Sabes lo que más me dicen cuando me escriben? Que los tatuajes le dan igual, que me quieren ver en otra serie. Claro, soy consciente que me he marcado mucho la imagen y eso hace que no tenga tanta posibilidad de encajar en un papel. Pero sé que llegará un personaje en el que no importe y ahí lo daré todo otra vez.
—¿Mantienes relación con algún compañero de Los Serrano?
—Con Víctor [Elías]. Me llevo muy bien. No nos vemos a menudo, pero hablamos y esa amistad va a ser para siempre. La serie nos unió mucho. Date cuenta de que los dos éramos chavales de barrio y, al final, la gente de barrio se entiende. Ahora que estoy en Madrid, voy a aprovechar para verle y darle un abrazo.
—También trabajaste en Física o Química.
—Fue otro boom. Ahí estábamos todos a una, para crear un proyecto. Mira la repercusión que tuvo y que sigue habiendo. A día de hoy, recibo mensajes de seguidores, tipo: ‘Qué guay el papel’. Esta serie ha marcado un antes y un después.
—La serie fue una cantera de talentos: Maxi Iglesias, Úrsula Corberó, Andrea Duro… ¿Con quién mantienes contacto?
—Con ninguno. Bueno, con Javi Calvo. Nos queremos mucho y son muchos años juntos. Con él, sí que hablo, porque me preocupo por él. De los demás también me preocupo, pero, al final, cada uno tiene su vida.
—¿Cabe la posibilidad de trabajo con Los Javis?
—Ojalá. Me encantaría. Además, con Javi siempre me he llevado muy bien. De hecho, se reflejó en el reencuentro de Física o química. Él está magnífico ahí. Yo un poco flojo a nivel actoral, he de reconocer. Al no seguir trabajando, te desentrenas un poco, pero la química que había entre él y yo estaba intacta. Espero poder hacer algo juntos en algún momento, por qué no.
—Como te decía, Física o química ha sido una cantera de talentos y la que más lejos ha llegado ha sido Úrsula Corberó, que estuvo de invitada hace unos meses en el programa de Jimmy Fallon. ¿Qué se te pasa por la cabeza viendo lo lejos que ha llegado?
—Olé por ella. Se lo merece. Ella lo ha hecho muy bien. Es el puro ejemplo de una persona que ama la profesión y que lo ha hecho bien. Se ha sabido mover y elegir bien su camino, sus contactos… Ha aprendido inglés… Ha llegado muy lejos y me alegro por ella, claro que sí.