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Parece que las aguas están volviendo a la calma para Ricky Martin. Este jueves, el Tribunal de Primera Instancia de San Juan ha tomado la decisión de archivar la denuncia por abusos domésticos que había presentado el sobrino del artista a principios del mes de julio. Un trámite legal lleno de controversia que ha tenido en vilo al cantante en las últimas semanas y que también ha causado mucho dolor a su círculo más cercano. Precisamente, Jwan Yosef, su marido, ha querido romper su silencio y mostrar todo su apoyo al intérprete de La copa de la vida compartiendo en sus perfiles sociales una fotografía de ambos en actitud cómplice y cariñosa. Una muestra de afecto incondicional que iba acompañado de una frase, sencilla a la par que significativa. "La verdad siempre prevalece", justamente, las mismas palabras que su esposo había usado en el primer comunicado emitido por su equipo legal tras conocerse la sentencia a su favor.
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De esta manera, la pareja, que lleva casada desde el año 2018 y tiene cuatro hijos en común, Matteo, Valentino (13), Lucía y Renn (3), han vuelto a demostrar su unión y que son capaces de anteponerse a la adversidad a pesar de las dificultades del camino. En otras ocasiones, el ganador del Grammy Latino ha explicado que el artista es el complemento perfecto en su vida, ya que él lleva una ajetreada agenda, marcada por sus 40 años sobre los escenarios y los viajes alrededor del mundo, y su cónyuge le ha dado un hogar que le aporta la estabilidad que tanto necesita al volver a casa.
La justicia ha dictaminado la inocencia del cantante tras una comparecencia online del joven denunciante, que, al parecer, tiene problemas de salud mental, en la que ha desmentido todas las acusaciones que había vertido sobre su tío y aclaraba que todos sus actos los había tomado de manera libre y voluntaria. Unas palabras que lograban limpiar el nombre de Ricky Martin ante la ley y el ojo público, pero no reparar el daño que ha causado a él y a todos sus seres queridos. De la misma manera, el vocalista ha confesado que su otro gran refugio fue la música y busca retomar con total normalidad los conciertos que tenía programados este fin de semana en la ciudad de Los Ángeles junto a la Orquesta Filarmónica. Igualmente, está grabando un nuevo sencillo y en pleno rodaje de la serie Mrs American Pie. Una manera de también agradecer a sus fans el cariño que le han brindado en esta complicada etapa.
Sin embargo, este no es el único asunto que le hará sentarse en el banquillo de los acusados. Su exmanager, Rebecca Druker, le reclama 3 millones de dólares por comisiones impagadas en el tiempo que trabajó junto a él. Además, su antigua representante ha asegurado que con el artista vivió un ambiente de lo más tóxico, e, incluso, un incidente muy desagradable en Dubai en el 2018, un supuesto altercado en el que también estaría involucrado su coreógrafo. Un nuevo escándalo en el que a buen seguro su marido permanecerá incondicionalmente a su lado.
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