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Jennifer Lopez y Ben Affleck celebraron su boda en petit comité, pues apenas su familia más cercana asistió a su "sí quiero" en Las Vegas. Sin embargo la pareja no quiere dejar pasar la oportunidad de reunir a sus amigos y celebrar con ellos en esta nueva etapa así que ya está planeando una fiesta para hacerlo. Según han comentado fuentes cercanas a los actores, están organizando una gran reunión en la que volverían a brindar junto a los familiares y allegados que no estuvieron en la ciudad de Nevada. Se apunta a que esta "reboda" sería pronto, en las próximas dos semanas, por lo que coincidiría con el próximo 53º cumpleaños de la artista, que es el 24 de julio, dentro de apenas unos días.
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El lugar elegido para esta fiesta es, como ha informado TMZ, la propiedad de 35.000 hectáreas que Ben tiene en Riceboro, en el estado de Georgia. En la lista de invitados estarían nombres como Casey Affleck, hermano de Ben, Matt Damon, uno de sus mejores amigos, el presentador Jimmy Kimmel y Drea de Matteo, compañera de reparto de Jennifer en la cinta Shades of Blue. Page Six apunta además a que serían unos dos o tres días de celebraciones que se extenderían a la isla de St. Simon, a unos 50 minutos de distancia, que cuenta con magníficas playas y un pintoresco faro.
Regresan a Los Ángeles
Por sorpresa y muy íntima fue la boda de Jennifer Lopez y Ben Affleck, un largamente esperado "sí quiero" que el destino retrasó 20 años, como dijo la propia artista. En una de las capillas más famosas de Las Vegas, White Little Chapel, y ante un reducido grupo, en el que estaban los hijos de Jennifer y su madre, unieron sus vidas. "Tenían razón cuando decían eso de 'todo lo que necesitas es amor'. Estamos muy agradecidos de tenerlo en abundancia, de tener una nueva familia maravillosa de cinco hijos increíbles y una vida juntos que estamos deseando vivir. El amor es una de las mejores cosas, tal vez la mejor de todas, y vale la pena esperar" escribió la cantante horas después.
Una de las primeras cosas que hizo Jennifer fue modificar su apellido, al menos en la firma de su blog, y mostrar lo encantada que está llevando la alianza en el dedo. Un anillo que también Ben lució mientras retomaba su rutina en Los Ángeles. Se ha podido ver a los recién casados, que de momento no se irán de luna de miel, haciendo sus tareas cotidianas quizá ultimando los detalles para su, ahora sí, gran boda.