Casilda y Lucía Sánchez, las hijas que tuvo Paco de Lucía con su primera mujer, Casilda Varela, se han unido a su viuda, Gabriela Canseco y a sus hermanos, para homenajear al guitarrista por todo lo alto. Tras perder a su padre a los 66 años de edad el pasado 2014, en septiembre del año pasado presentaron juntas la fundación que lleva el nombre del guitarrista flamenco. Ahora lo quieren dar a conocer con un gran homenaje en el Teatro Real en el que han reunido a todos sus amigos y con el que esperan dar a conocer la cara más desconocida del artista, la que sólo conocían en casa.
Casilda lo explica así “Tardamos un tiempo en crear la fundación porque queríamos hacer algo que fuera sobre seguro. La imagen de mi padre, su impacto, exige que cualquier cosa que se haga sobre él tenga la misma calidad y el mismo rigor que tenía él. Hemos trabajado mucho para que la fundación fuera muy sólida y queríamos que el pistoletazo de salida fuera este homenaje, un documental en vivo. Con todo el material que tenemos explicamos su gran revolución musical pero también quién era el de verdad más allá de esa imagen de torturado y serio que mucha gente tiene de él y que no tiene nada que ver lo que nosotras recordamos”
“Infinito” es el título del gran concierto en su memoria que se celebrará el próximo 30 de julio, un gran homenaje en el que participarán más de 20 artistas, entre ellos Niña Pastori, Sara Baras, Farruquito, Miguel Poveda, Farru, Mariza o John McLaughlin. También su sobrina, Malú, que aunque está en plena gira tras la maternidad, ha sacado tiempo para participar en este gran homenaje haciendo la escaleta y aportando su granito de arte al espectáculo. Lo confirma su prima Lucía: “Malú no va a poder estar porque está en plena gira pero nos ha ayudado en la estructura de la escaleta y ha aportado su granito artístico”
Quieren dar a conocer al gran guitarrista desde su mirada, una perspectiva mucho más íntima y desconocida, que el gran genio pocas veces dejaba entrever al público. Las dos hermanas coinciden: “era un gran tímido”. Como padre las dos confiesan lo mismo también: “Era muy estricto como padre. No nos dejaba salir, ni tener novio, ni fumar pero era un grandísimo consejero. Sabía aconsejar como nadie, cuando todo el mundo te decía A o B, el salía con un C que nadie había planteado y que era la solución perfecta”.
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La familia ha buceado en todo el material casero que conservan para encontrar las mejores imágenes que mostrar al mundo entero. Casilda asegura que cuando le recuerdan sienten “Luz más que sombras. Siempre, por todas partes, porque la gente le percibe como un artista, una leyenda y así hablan de él, como algo distinto”. Su viuda, Casilda Varela, no tiene duda: "Le hubiera encantando ver unida a toda la familia y a sus amigos recordándole", asegura que estar a su lado fue "siempre muy divertido".