Este viernes 17 de junio, pasada las 13:30 del mediodía, se ha desvelado el secreto mejor guardado de la boda de Chenoa: el vestido de la novia. Radiante y emocionada, la popular y querida cantante ha desfilado por los jardines de la finca Comassema de Mallorca del brazo de su padre, Juan Antonio ‘Tati’ Marino, hacia su encuentro con su prometido, Miguel Sánchez Encinas, un prestigioso médico especialista en urología.
Para ti que te gusta
Lee 8 contenidos al mes solo con registrarte
Navega de forma ilimitada con nuestra oferta
1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
“He estado encantada de dejarme llevar por sus líneas sutiles y románticas”, nos contaba la artista unos días antes de su ‘sí, quiero’ sobre Hannibal Laguna, quien ha firmado la creación, una pieza de Alta Costura. El diseñador, de origen venezolano y uno de los grandes referentes de la industria española, ha vestido, además de la que fue una de las concursantes más aclamadas de la primera edición de Operación Triunfo, a otras novias muy conocidas en nuestro país, como la leyenda del tenis Arantxa Sánchez Vicario, la actriz Vanessa Romero o Rocío Carrasco, hija de Rocío Jurado.
Una diva de recuerdo imborrable
En palabras del modista, el look nupcial de Chenoa ha estado inspirado “en su personalidad, su silueta y, sobre todo, en su penetrante mirada”. A su vez, es un tributo a la actitud que la cantante siempre ha demostrado dentro y fuera de los escenarios, lo que desde los inicios de su carrera musical ha cautivado a sus seguidores. “Este vestido se caracteriza por sus reminiscencias cinematográficas y están enmarcados en las sublimes siluetas de las divas de los años 30. A Chenoa siempre la he visto como una gran diva por su forma de ser, su voz… y, en especial, como decía, su mirada, que me recuerdan a las protagonistas de la edad de oro de Hollywood quienes, solo levantando una ceja, dejaban un recuerdo imborrable”, añade el couturier. Por su parte, la cantante opina que las creaciones únicas de Laguna “definen al máximo la silueta femenina sacando siempre el mejor resultado”.
En su gran día, la artista ha llevado un vestido en doble crepe color blanco tiza y organza de seda combinando matices secos y brillantes que han realzado la profundidad del bordado y el efecto “tono sobre tono”. Una elegante silueta evasé cortada al bies con cintura entallada y enmarcada a modo de fajín, desde donde nace el pronunciado escote en forma de ‘V’. Las mangas traslúcidas descansaban sobre puños abotonados y han adquirido protagonismo con el movimiento. Uno de los detalles más espectaculares de la creación ha sido la cola de organza de casi tres metros que nace “de una espalda desnuda y esculpida con cordones de cristal”, en palabras de su diseñador.
Chenoa, al contrario que muchas novias, ha preferido prescindir del velo y ha lucido un sencillo recogido, ejecutado por Carmen Marín, y un maquillaje natural y romántico, ejecutado por la maquilladora Inma Bono, ambas las responsables de la imagen de la cantante en Tu cara me suena (Antena 3), el programa donde ejerce de jurado. Para completar su estilismo, la novia ha optado por unos pendientes en forma de lágrima y una fina pulsera de Eugenio Lumbreras. A su vez, ha elegido unas espectaculares sandalias joya de punta fina de Magrit -el modelo Yasmine-, con tiras en raso blanco y t-bar con cristales de Swarovski que ella misma ha definido como “una fantasía”. Lo mismo han pensado los poco más de noventa invitados cuando la han visto aparecer por primera vez vestida de blanco. Una fantasía.