Dignas de una estrella de Hollywood. Así son, como no podía ser de otra manera, las fabulosas vacaciones en el mar que Richard Gere y su familia están disfrutando en Ibiza. El actor estadounidense; su mujer, la española Alejandra Silva (ahora Gere), y sus dos hijos han dejado su rancho a las afueras de Nueva York para viajar a nuestro país y pasar unos días de descanso, en los que no faltan las aventuras acuáticas.
A sus setenta y dos años, el protagonista de Oficial y caballero está en plena forma y no duda en surcar las aguas del Mediterráneo a lomos de una veloz moto náutica, mientras su mujer y los pequeños le contemplan desde la cubierta del barco o sobre una tabla de paddle surf, deporte que prefiere practicar Alejandra. Como informábamos en nuestro número anterior, los Gere han alquilado para su estancia un superyate de lujo, con todas las comodidades.
La nave, de líneas deportivas, tiene 26 metros de eslora, capacidad para ocho personas en sus cuatro camarotes dobles y cuenta con tres tripulantes a bordo. Se trata, además, de una embarcación rápida que puede alcanzar los 34 nudos, lo que les permite ir de un lugar a otro de la isla sin perder tiempo o visitar las paradisíacas playas de la vecina Formentera. Su precio, en temporada baja, es de casi siete mil euros al día. El eterno galán del cine ejerce ahora su mejor papel, el de padrazo, con los dos niños nacidos de su matrimonio con Alejandra: Alexander, de cuatro años, y el pequeño, de dos y del que aún no han desvelado el nombre.