La romántica foto con la que Tamarra Gorro anunció su reconciliación con Ezequiel Garay está dando mucho que hablar, tanto que el que fuera futbolista del Real Madrid ha roto su silencio por primera vez para hablar claro sobre su relación y romper una lanza en favor de la influencer, defendiéndola de las críticas que está recibiendo. En una carta, que ha compartido con sus seguidores, el deportista se muestra así de rotundo al hablar de la extronista de Mujeres, hombres y viceversa: “Estoy cansado de que se insinúe que la enfermedad de mi mujer es falsa. Todo esto es lo que provoca que no se avance en las enfermedades mentales: la duda”
Hace unos días pudimos verles pasear juntos de nuevo, muy cariñosos, viviendo este nuevo comienzo. El guardameta Argentino no quiere que su relación se cuestione y asegura haber llegado a su límite: “Nunca he hecho ninguna declaración sobre lo que lleva sucediendo estos meses. Pero es el momento de hacerlo, porque creo que todo tiene un límite y se está sobrepasando”. Rompe su silencio explicando cómo afrontó su separación hace seis meses y se muestra muy sorprendido ante el revuelo que ha causado la segunda oportunidad que ha decidido dar a su relación: “Cuando mi mujer y yo nos separamos, recibía miles y miles de mensajes de pena, tristeza y apoyo, mucho apoyo... incluidos los medios de comunicación. Hoy estamos juntos de nuevo y se está diciendo que todo era una mentira y nadie se alegra. Estamos viviendo en un mundo al revés, en el que prevalece lo malo, sobre lo bueno. Nos alegramos cuando a las personas les va mal y criticamos cuando les va bien. Pongámonos de acuerdo por favor y demos ejemplo a esta sociedad y a las nuevas generaciones”
Quiere dejar de escuchar mentiras y así lo manifiesta, apoyando a Tamara Gorro, que sufre una depresión desde hace dos años, y dejando claro que ahora mismo la influencer es lo más importante para él. Así habla de ella en su escrito: “Tuve que aguantar como se especulaba sobre mí y mi separación con mentiras. Dando voz a personas que inventan todo para hacer daño... que triste. También quiero decir que estoy cansado de que se insinúe que la enfermedad de mi mujer es una farsa…¿qué narices está pasando en este mundo? Ojalá fuese una mentira, porque no le deseo a nadie lo que ella está viviendo desde años, y por supuesto yo también como compañero de vida. Pero como ahora empieza a sonreír, ya no vale, ya es mentira... Todo esto es lo que provoca que no se avance en las enfermedades mentales, la duda”.
“Dejemos que la gente se pelee, se arregle o se separen de por vida. Estoy convencido de que viviremos en un mundo mucho mejor. Termino diciendo que respeto el trabajo y la opinión de cada uno (incluidos los medios) y así siempre lo mostré, pero la mentira no. Muchas gracias. Sed felices”, concluye así la misiva, intentando zanjar las críticas y especulaciones sobre su relación e invitando a todos a una profunda reflexión.