Dos años sin Pau Donés, dos años escuchando su música en los discos que publicó con Jarabe de Palo y aprendiendo de su entereza a través de sus reflexiones. El recuerdo del cantante sigue muy presente en este 9 de junio entre los suyos, que de manera discreta han afrontado estos meses sin él, y también entre los fans, que siguen repitiendo esas frases que se han convertido ya en un mantra. La frase "Vivir es urgente", palabras que él mismo imaginó plasmadas en una camiseta antes de uno de sus conciertos, se ha convertido ahora en un talismán que ayuda a aquellos que precisamente se enfrentan a la enfermedad que le costó la vida. “Como si de una buena canción se tratara, Pau había sido capaz de concentrar en una sencilla frase todo su legado”, dijo Marc Donés, hermano del artista, hace unos meses en la presentación de esta prenda, cuyas ventas se destinan a la investigación y lucha contra el cáncer gracias a la Fundación Cris.
Es precisamente Marc junto a Sara, la hija del intérprete, quien gestiona el legado que dejó tras de sí el músico. Como publicaba el Boletín Oficial del Registro Mercantil el pasado 3 de marzo, Sara ya figura como la nueva socia única de Tronco Records, la discográfica que creó su padre a finales de los 90, una compañía en la que su tío Marc figura como administrador solidario (en sus cuentas depositadas en el registro en el 2017, su volumen de ventas fue de 2,5 millones de euros). La discográfica, cuya denominación completa es Tronco Records S. L. (República Independiente de Jarabe de Palo), se fundó en 2008. Está destinada a actividades de grabación de sonido y edición musical, aunque estas fueron ampliadas posteriormente al sector de los bienes inmuebles. También Marc es administrador solidario de Casa Alena Bichos y Verduras SL, dedicada a la compraventa de bienes inmobiliarios (en 2017 tenía un volumen de ventas de 500.000 euros). Donés tenía además varias viviendas en Montanuy (Huesca), Formentera, Barcelona y el Valle de Arán, donde se rodó la última entrevista que concedió a Jordi Évole y que se habría vendido hace unos meses (no transcendieron los detalles).
Sara, que este año alcanza la mayoría de edad, sigue manteniendo el anonimato y la discreción que han marcado su vida. El artista lamentó siempre sus largas ausencias durante la infancia de la pequeña, una situación que trató de paliar en 2018 cuando se retiró de los escenarios y se marchó con ella a California. “Me perdí la infancia de mi hija. El año que nació estuve dos meses en casa. Ahora nos hemos vuelto a encontrar. Estoy encantado de poder empezar a vivir con ella", contó. Sara compartía durante aquella etapa con su padre sus sueños de ser médico, aunque por desgracia la enfermedad se entrometió en sus planes y les obligó a volver a España. La discreción es también una máxima que siguen los hermanos del intérprete (tiene cuatro). Uno de ellos, Bernat, apareció durante la entrega de la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes del año 2020 que se concedió a título póstumo al artista.
Ellos gestionan y mantienen vivo un legado, que no solo es material sino sobre todo humano. Eso que tú me das, el documental que vio la luz tras su muerte, es una auténtica lección vital de aceptación. “Cuando ya sabes que el tiempo es corto, el tiempo te hace muy feliz cuando lo gozas, cuando estás a gusto... pero es una felicidad cabrona porque pienso ¿por qué no me puedo quedar más a disfrutar de todo esto? Eso me da tristeza realmente, pero ahora estoy aquí, prefiero quedarme con eso. Después, yo qué sé, ya volveremos", dijo en la entrevista que concedió a Jordi Évole y que se emitió tras su fallecimiento. "Adoro a mi hija. La quiero con locura, me ha enseñado a querer y a saber decir 'te quiero' con corazón y mirando a los ojos", afirmó el cantante. "Es una tía muy lista y muy despierta. Tiene muchas cosas nuestras, del clan y muchas cosas mías de capacidad o la velocidad para analizar las cosas y para decidir. No se asusta, ella es decidida. Cuando quiere algo, va y eso está muy bien, en la vida, ayuda" añadía sobre su hija.