Rafa Nadal se alzó con la victoria en cuartos de final sobre Novak Djokovic, número 1 del mundo y defensor del título. El tenista español se impuso al serbio en un partido que acabó de madrugada tras durar cuatro horas y 11 minutos. Con este triunfo, Nadal impide que Djokovic tenga opciones de sumar su tercer título en París y le iguale a 21 Grand Slam. Además, se sitúa un paso más cerca de su decimocuarta corona en Roland Garros. Este viernes, 3 de junio, se medirá por un puesto en la final con el alemán Alexander Zverev. Si gana será inolvidable, pues ese día cumple 36 años y obtendría el mejor de los regalos: el pase a la gran final del torneo, que se disputará el domingo, 5 de junio, a partir de las 14:30 horas.
- Mery Perelló, con los nervios a flor de piel en el ¿último Roland Garros de Rafa Nadal?
Tras ganar a Djokovic, Nadal hizo unas declaraciones muy alarmantes sobre su futuro, debido al dolor intenso que sufre constantemente en el tobillo izquierdo por el síndrome de Müller-Weiss. "Si no soy capaz de encontrar una solución o alguna mejora, todo se hace mucho más complicado. Voy a seguir peleando, pero de momento no la tenemos", dijo. "Hablaremos después del torneo y entenderéis un poco todo. Pero por ahora, vamos a dejarlo todo. No sé qué puede pasar después de aquí. Creo que aquí puedo competir y después ya veremos cómo queda todo. Ahora mismo no es momento de dar explicaciones, pero la tiene. Cuando termine os lo explicaré. A partir de ahí, vamos a estar centrados en estas semifinales", añadió.
El de Manacor, de 35 años, estaba muy satisfecho con el partido que había jugado contra Djokovic. "Ha sido el mejor de los cuatro últimos meses", confesó con sorpresa. "En el día que más lo necesitaba, he conseguido sacar un nivel que pensaba que no tenía".
Para Rafa Nadal, una de las cosas más importantes es tener a su familia cerca. Tanto sus padres como su hermana y su esposa suelen acompañarle por todo el mundo para vibrar con cada punto que marca, celebrar sus victorias y apoyarle en la derrotas. Y en esta ocasión también estaban presentes para verle jugar contra Djokovic. Porque para el manacorí el verdadero éxito no es solo su brillante palmarés, sino poder disfrutar de sus premios con las personas que quiere y que han estado presentes desde sus inicios. Sebastián Nadal, Ana María Parera y Maribel Nadal han sido testigos de su evolución y han visto cómo aquel niño de Manacor que entrenaba con su tío, Toni Nadal, ha transformado un hobby en profesión y se ha convertido en leyenda gracias a su sacrificio, trabajo duro y humildad.
También Mery Perelló ha visto de cerca ese crecimiento puesto que conoció al deportista siendo ambos adolescentes y ha sido un pilar fundamental. La directora de la fundación Rafa Nadal siempre en un segundo plano y cediéndole todo el protagonismo a su marido, con el que forma un tándem perfecto desde hace cerca de dos décadas. En 2019, después de 14 años de discreta relación, contrajeron matrimonio en la fortaleza de Albercuitx de su Mallorca natal con invitados como don Juan Carlos y doña Sofía y otras estrellas del tenis como Feliciano López o Carlos Moyá. Ambos se conocieron porque Maribel y Mery eran compañeras en el colegio Pureza de María de Manacor.
Nadal está completamente volcado en dar lo mejor de sí mismo sobre la pista, pero el quinto en el ránking ATP también promueve diferentes labores sociales. Hace un mes, también arropado por su familia, presentaba los dos nuevos proyectos que ha puesto en marcha con su fundación: UAX Rafa Nadal Sports, una iniciativa conjunta con la Universidad Alfonso X el Sabio con la intención de crear "un centro de referencia mundial en salud, deporte y educación"; y un nuevo Centro Fundación Rafa Nadal en la capital, ubicado en el barrio de Usera, para atender a menores y sus familias en riesgo de exclusión social a través de actividades deportivas, educativas y de apoyo psicosocial.
Fregando los platos o cortándose el pelo en el salón: la tranquila vida de Novak Djokovic en su mansión de Marbella