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Barcelona se convertía la semana pasada en el punto de encuentro de los mejores pilotos con el Gran Premio de España, y entre ellos, además de los grandes nombres de la Fórmula 1 se han dado cita las pilotos que compiten en la W Series, donde hay tres españolas que pisan con fuerza el acelerador y sueñan con convertirse en grandes figuras de este deporte . Se llaman Nerea Martí, Belén García y Marta García y son tres prodigios al volante que llevan desde niñas en el mundo del motor y ahora, destacan en esta competición femenina que por segundo año consecutivo va de a mano de la Fórmula 1 y que esta temporada por primera vez ha llegado a España.
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Los motores de sus monoplazas rugieron el pasado sábado 21 de mayo en el Circuito de Cataluña donde hicieron una buena carrera, aunque no pudieron realizar su sueño de subir las tres al podio. Marta quedó sexta, Belén, séptima; y Nerea, octava. Cruzaron la meta felices, sobre todo por sentir el calor del público español, que las animó en cada una de las vueltas. Con ellas pudimos hablar antes de la carrera y nos han contado cómo es su vida cómo deportistas de élite , cómo empezaron a conducir y cómo a base de esfuerzo han logrado abrirse paso en el deporte del motor, que siempre ha estado liderado por hombres. Ellas sueñan con llegar a lo más alto, poder competir en la Fórmula 1 y sobre todo, inspirar a futuras generaciones de pilotos, para que vean que sí se puede.
-¿Qué significa para vosotras corren en casa, en España?
-NEREA: Obviamente, estoy súper contenta de estar aquí, de que las W Series hayan venido a Barcelona. El año pasado tenía muchas ganas de que viniéramos con la competición, pero no pudo ser. Yo creo que estar delante de toda la afición española y en casa es un punto muy bueno para nosotras y también una oportunidad, quizás, de hacer un mejor resultado.
-MARTA: ¡Es muy guay! Yo llevo tres años corriendo la W Series y es la primera vez que corremos en España, así que muy bien porque tenemos a todos los fans y a la afición española que nos va a apoyar y creo que lo vamos a notar bastante. En cuanto al circuito, creo que somos las que mejor nos lo sabemos porque hemos rodado aquí más veces, así que, por esta parte, también está muy bien, aunque que sea el circuito de casa no significa que sea el que mejor se te da, que al final, los circuitos son muy diferentes.
-BELÉN: Para mí es estar en casa. Yo llevo toda la vida aquí porque mis padres tenían una empresa de cronometraje y he trabajado muchas veces en este circuito. Además, vivo a diez minutos, así que estoy literalmente en casa. El hecho de poder ir a casa a dormir es algo súper inusual en las carreras y estoy súper contenta por ver a mi perro cuando vuelva a casa.
“Desde W Series se ha revolucionado lo que es el papel de la mujer en el deporte del motor, somos más, se ha normalizado muchísimo y cada vez ves más niñas que empiezan”, cuenta Belén
- Cuando trabajabas en el circuito con tus padres, ¿imaginabas que acabarías corriendo alguna vez aquí como ahora?
-Belén: Lo soñaba, yo veía a la gente y me quedaba loca… siempre me ha encantado. La verdad es que había corrido por la pista a pie, pero en coche hasta hace tres o cuatro años no lo había hecho nunca, así que es un sueño cumplido.
- ¿Qué diferencia hay entre la W Series y la Fórmula 1 que estamos acostumbrados a ver en casa en las pantallas?
-Marta: La Fórmula 1 es un campeonato mixto, lo que pasa es que hoy en día no se ve ninguna mujer, lo hacen en un Fórmula 1, un coche con mucha más potencia, y también corren en más países que nosotras. Pero es un campeonato internacional como el nuestro. La W Series es un campeonato único para mujeres, somos 18 pilotos y corremos junto con la Fórmula 1, como teloneras digamos, como categoría que está aquí de soporte. Por otro lado, nuestro coche no corre tanto como los suyos porque el nuestro es un Fórmula 3, tiene 270 caballos y tiene muchísima menos aerodinámica que el Fórmula 1.
- Pero voláis igual.
-Belén: Aquí los coches, además, son iguales para todas, entonces es como que vamos todas a una con el ánimo de promocionar el papel de la mujer en el deporte.
-¿Creéis que hoy en día se ve a las mujeres como pilotos o todavía hay mucha gente que piensa que las chicas no sabemos conducir?¿Pensáis que la sociedad ha avanzado en esto?
-Nerea: Yo creo que cada vez se ve más a las mujeres pilotos. También gracias a la W Series tenemos mucha más visibilidad, además, el año pasado y este año más aún porque vamos con la Fórmula 1 y quieras o no, esto nos da mucha más imagen. Pienso que cada vez se está haciendo todo más normal y creo que es cuestión de tiempo que haya categorías mixtas y que lo veamos como algo completamente normal.
-Belén: Yo creo que desde W Series se ha revolucionado lo que es el papel de la mujer en el deporte del motor, cada vez somos más y se ha normalizado muchísimo y cada vez ves más niñas que empiezan y que siguen con muchísima ilusión y eso es lo más importante.
-Marta: Yo pienso también como ellas, que la W Series nos da bastante visibilidad y esto le da un impulso a las niñas que están empezando desde abajo. Creo que cada vez se está normalizando más. Creo que todas siempre hemos corrido en karting con hombres, creo que ha sido a partir de los fórmulas que ha salido este campeonato de mujeres, pero antes, nosotras siempre hemos corrido con hombres y hemos estado a la misma altura.
-Me habláis de las niñas que están empezando, ¿Cuándo empezasteis vosotras?
-Marta: Yo me subí por primera vez a un kart -que era de alquiler, lo típico que vas con tus padres- a los seis o siete años, pero solo fui un día. Luego, a los nueve, me acuerdo que fui otra vez y me gustó mucho. A partir de ahí, me compró un kart mi padre y empecé a competir a los diez años y ahora tengo veintidós, o sea que ya llevo bastante tiempo con el tema del motor.
-Belén: Yo empecé por mi padre, que corría en motos, y luego mis padres montaron una empresa de cronometraje, entonces las carreras siempre han estado en mi vida. A los seis años me regalaron una moto de motocross y la verdad es que me gustaba mucho, pero como siempre he sido tan enana, para pasar a la siguiente moto no llegaba al suelo, entonces no podía ser. Tuve ahí un parón, pero luego, como Marta, un día probé un kart de alquiler y me gustó, además el kart lo puedes adaptar un poco más a tu cuerpo y lo puedes llevar siendo pequeña. Pero hasta los quince años no empecé a competir, por temas económicos, y en 2019 empecé en fórmulas.
-Nerea: Yo empecé porque mi padre y mi tío abrieron un karting en Valencia y ahí empezó un poco todo. Sí que es verdad que, al principio, no me dejaban competir porque era un deporte muy caro, pero al final, me dieron la oportunidad y empecé con trece años. Después, al igual que Belén, en 2019 empecé en fórmulas, en Fórmula 4.
“Cada vez hay más mujeres pilotos. También gracias a la W Series tenemos mucha más visibilidad, además, y más aún el año pasado y este año porque vamos con la Fórmula 1”, dice Nerea
-¿No le daba miedo a vuestros padres?
-Marta: Yo por mi parte, no. A mi padre le gustaba mucho el mundo del motor y desde siempre veía la Fórmula 1, así que está la mar de contento porque nunca se esperaba tener una hija a la que le gustase el mundo del motor, porque no es lo habitual. Y a mi madre sí que le daba un poco más de miedo, pero al final se acostumbró. Al principio no veía las salidas, que es lo que más miedo le daba porque estamos todos muy juntos, pero ya se ha acostumbrado y de hecho, disfruta de las carreras.
-Nerea: Yo con los dos no he tenido problemas. A los dos siempre les ha encantado el mundo del motor, así que con este tema no he tenido problemas.
-Belén: Yo recuerdo desde enana subirme encima de mi padre en la furgo y conducirla yo y subirme en su moto de motocross y yo encantadísima. Se pusieron como límite de edad los seis años para tener moto y justo, casi el día que los cumplí, la tuve y están encantadisimos, así que todo genial en casa.
“Me subí por primera vez a un kart a los seis o siete años, pero solo fui un día. Fui otra vez a los nueve y me gustó mucho. A partir de ahí, me compró un kart mi padre y empecé a competir a los diez años y ahora tengo veintidós”, dice Marta
-Una cosa, tres pilotos como vosotras cuando os habéis sacado el carnet de conducir normal, el B, ¿habéis aprobado a la primera?
Sí -responden las tres, mientras comentan entre ellas si les patinaba el embrague-.
- ¿Es fácil conciliar la vida familiar y las amistades con la competición que estáis haciendo ahora, con tantos viajes y entrenamientos?
-Nerea: Depende, si estás cien por cien en el deporte, es difícil compaginarlo porque te queda poco tiempo libre, pero bueno, al final siempre queda algo para pasar un poco de tiempo con la gente a la que realmente quieres. Obviamente, yo creo que nos hemos dejado a mucha gente por el camino, porque no podemos estar con todo el mundo. Al final, tienes que decidir y pensar en el futuro. Estando en este deporte tienes que elegir a la gente más cercana, que es la que más te va a apoyar y ellos siempre lo entenderán y por supuesto, contar con el apoyo de la familia.
-Belén: Y también que entiendan lo que estás haciendo porque muchas veces desde fuera es muy difícil entender que estés todo el día en un circuito, ocupada todo el rato. Es difícil hasta con profesores con los que hablas para cambiar exámenes, te dicen: ‘¿Pero no estarás todo el día en el coche?’ Pero claro, es que no es solo estar en el coche, también es el equipo, ingenieros… Hay mil cosas que hacer que muchas veces la gente no entiende. Incluso con mi novio, que también es piloto, a veces es difícil porque entre sus carreras y las mías estamos siempre fuera.
-Marta: Yo también pienso como Nerea y Belén. En cuanto a las relaciones, he perdido muchas por estar en el mundo del motor. De hecho, te diría que del colegio conservo solo una amistad, que es mi amiga de toda la vida. Así que las relaciones se pierden muchas, pero las verdaderas yo creo que no se pierden. Y luego, está el tema de sobrellevar la Universidad, porque Belén, como yo, está estudiando. Ella una Ingeniería, que es más complicado, y yo Comunicación y Relaciones Públicas. Ahora mismo, la semana que viene tengo exámenes y estoy entre la carrera, que tienes que estar centrada, y los trabajos de la universidad, que también hay que centrarse… Como que al final tampoco puedes estar en todo y tienes que organizarte bastante bien.
-¿A qué pilotos admiráis y cuál es vuestro sueño dentro del automovilismo?
-Nerea: Me fijo mucho en los pilotos de Fórmula 1, que al final son los mejores, y me gusta coger cosas de cada uno, pero ya no solo como pilotos, sino como deportistas. Por ejemplo, yo estoy en un centro de alto rendimiento y siempre hay alguien que destaca en su deporte en el centro y siempre puedes aprender algo de esas personas. Mi sueño, ojalá ser piloto profesional y poder vivir de este mundo en lo que más me gusta, que son los fórmulas.
-Marta: Cuando era muy pequeña, siempre me había fijado en Fernando Alonso porque era el español que había en la Fórmula 1. Luego, según iban pasando los años, me ha gustado mucho Lewis Hamilton como piloto y también por cómo se comporta fuera de pista porque es inspirador y creo que es súper importante. Otra deportista que también me ha influido mucho es Serena Williams. Creo que ellos han sido, no clave, pero sí las personas que me inspiran para seguir alcanzando sueños, objetivos y todo. Y mi sueño es llegar a la Fórmula 1, pero hay que ser realistas, es complicado. Quiero poder vivir de esto, ganar dinero y disfrutar de lo que hago.
-Belén: En mi caso, mi ídolo de la infancia siempre ha sido Michael Schumacher. Creo que su manera de trabajar es lo que me ha fascinado, pero a lo largo de los años he visto muchas actuaciones distintas de pilotos en distintas carreras y eso lo que llego a admirar más que a una persona en sí. Y también, como he hecho Atletismo muchos años, tengo muchos ídolos en el Atletismo. Creo que todos los deportes te aportan mucho en tu vida. Y como sueño, me gustaría dedicarme a lo que quiero que es el deporte del motor y bueno, sabemos que es muy difícil, pero para eso estamos.
- Belén, tú has sido saltadora de pértiga, ¿verdad?
- Era, lo he tenido que dejar.
- Se ve que te van las emociones fuertes
- Sí, yo la verdad es que todo lo que me eches tiene que ser lo más difícil… la ingeniería, la pértiga, los fórmulas… ¡me complico la vida!