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¡HOLA! retransmitirá la boda de la ‘influencer’ en directo, que tendrá lugar el 28 de mayo, en Jávea

Marta Lozano, confesiones de la chica de moda, en Cannes, días antes de casarse

‘Ahora los nervios son reales. Tengo los sentimientos a flor de piel, pero me muero de ganas’

27 de mayo de 2022 - 9:01 CEST27 may 2022 - 9:01 CEST

Anne Hathaway, Marion Cotillard, la modelo Alessandra Ambrosio… y Marta Lozano . Sí, la influencer también ha conquistado Cannes, de la mano de Dior Beauty. Ha sido este pasado viernes 20 cuando la española ha regresado al emblemático festival de cine, en Francia, y ha acaparado los flashes en la presentación de Tres mil años esperándote, la nueva película de Tilda Swinton. Marta ha deslumbrado con un atrevido diseño de Vicky Martín Berrocal, elaborado en tafetán de seda y con cola de cuatro metros y medio, que ha combinado con imponentes joyas de Messika.

Aunque ha sido su cuarta visita a Cannes, la joven nos confiesa que ha sido la vez que más nervios ha tenido. Algo completamente comprensible, si se tiene en cuenta que este sábado 28 de mayo celebrará su boda con el odontólogo Lorenzo Remohi, en Jávea. Será un momento que retransmitirá ¡HOLA! en exclusiva . “Es muy fuerte que me vaya a casar con mis veintiséis añitos”, confiesa, emocionada, tras conquistar Cannes de nuevo.

—¿Cómo has vivido esta visita?

—Ha sido de las más heavies por cómo estoy. Tengo los sentimientos a flor de piel. Me siento afortunada por poder vivir, por cuarto año, el sueño de Cannes.

—Como conoces ya el festival, ¿te has sentido más tranquila?

—Al estar tan próxima mi boda, he estado más nerviosa. El año pasado, me acababa de pedir matrimonio Lorenzo y estaba anestesiada (ríe).

—También, el año pasado, dejaste el listón muy alto con el diseño de Caprile. ¿Has sentido más presión?

—Total (ríe). Tenía un poco de presión, pero estaba muy segura del trabajo de Vicky. Es auténtica y supertalentosa. Me hace una ilusión tremenda que me haya vestido. En cada prueba, sentía mucha conexión con ella. Lo que más me sorprendió es que me propuso un color, el lima, que yo jamás me hubiera puesto… Pero Vicky me dio confianza.

Nos desvela que aún quedan por ultimar detalles del enlace: “Mientras me arreglaba, no hemos parado de recibir llamadas de proveedores”

—¿Cuánto tiempo necesitas para prepararte antes de una aparición así?

—Hemos empezado a las tres de la tarde, para salir a las siete.

—¿Cuatro horas?

—Sí, sí. Con el maquillador de Dior me he tirado, facilísimamente, dos horas. Después, otra con el peluquero, que trabaja siempre con Carla Bruni y con gente muy top. Luego, he hecho producciones para vídeos… Este año, Messika me ha dejado joyas muy muy especiales… Solo el anillo eran casi cinco millones y medio de euros. Por eso, he estado custodiada todo el rato. A excepción de la alfombra roja, un guardia de seguridad de Messika no se ha separado de mí.

—Menuda responsabilidad, llevar un anillo de casi cinco millones y medio.

—Cuando apareció el equipo y vi que eran ocho personas, pensé: “Madre mía, cuánta gente”. Me enseñaron las piezas para ver cuáles me gustaban más. Una, que no es tonta, eligió el anillo de cinco millones y medio (ríe). Pero también he llevado otros dos anillos y los pendientes… El valor total superaba los seis millones. Cuando Bruno —su representante— me lo ha dicho, casi me caigo. Menos mal que me he enterado tras la alfombra.

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—¿A quién has visto este año en Cannes?

—No sé qué pasa, pero son dos años seguidos los que he coincidido con Tilda Swinton. Muy heavy. El año pasado, me la crucé en los pasillos del hotel Majestic. Este año, he llegado a la alfombra roja justo después que ella con su equipo. Ya la siento como familia (ríe).

—¿Has tenido ocasión de ver a alguna otra estrella?

—He visto a Alessandra Ambrosio, aunque muy lejos. Ha habido muchísima gente. No sé si es porque he ido la primera semana, pero este año ha estado muy masificado. Pero a Tilda la he tenido hombro con hombro porque hemos llegado casi a la vez.

—¿Has podido hablar algo con ella?

—Qué va. La ha rodeado un ejército de periodistas.

Nervios en su camino hacia el altar

—No queda ni una semana para tu boda. ¿Estás lista?

—¡Madre mía! Tengo los sentimientos a flor de piel, pero me muero de ganas. ¿Lista? No sé cuándo se está lista, pero ganas tengo muchísimas. Además, este fin de semana, en Cannes, no he parado de ver bodas en Instagram y ya quiero verme así con Lorenzo.

—¿Sientes más nervios a medida que se acerca el día?

—Sí, ahora los nervios son reales. A veces, se me cierra el estómago y ni puedo comer. Solo pienso en eso.

“Estando en Cannes, no he parado de ver bodas en Instagram y ya quiero verme así con Lorenzo”, cuenta la influencer a ¡HOLA!

—¿Lorenzo y tú ya tenéis todo listo?

—Mientras me estaba arreglando (en Cannes), a Bruno no han parado de entrarle llamadas de proveedores de la boda para preguntar por el color de algunas cosas.

—Tu gran temor es que te llueva el día que te casas…

—¡Pues he visto que ese día hace bueno!

—Entonces, han funcionado los huevos a las Clarisas.

—¡Los tengo que llevar! Es algo que se hace la misma semana en la que te casas.

—Hace unas semanas, ya anunciaste que ¡HOLA! retransmitiría tu boda en directo. ¿Cuál ha sido la reacción de tus familiares y amigos?

—Están flipando. Además, como la abuela de Lorenzo no puede venir —tiene noventa y ocho años—, se llevó una ilusión tremenda, porque ya lo puede ver y acompañarnos. Pensaba que le iba a chocar a mi entorno, pero están muy contentos y les hace mucha ilusión. Como he compartido mi vida estos ocho años con mi comunidad, lo entienden… ¿Por qué no compartir también este día tan importante?

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