Amber Heard ha asegurado, en una nueva jornada del proceso judicial que la enfrenta a su ex Johnny Depp, que la ?campaña difamatoria? del equipo legal del actor ha tenido sus primeras consecuencias. La actriz ha contado que la productora Warner Bros. ha reducido sus escenas en la película Aquaman y el reino perdido, cuyo estreno está previsto para el próximo 2023. ?Me dieron un guion y posteriormente me mandaron nuevas versiones en las que, básicamente, habían limitado gran parte de mi papel?. Según explicó, los abogados de Depp la están etiquetando de ?mentirosa? ante la prensa para arruinar su carrera lo que habría provocado la reacción de la productora.
El tenso momento entre Johnny Depp y Amber Heard en el juzgado que se ha convertido en viral
Tal y como detalló Heard, su aparición en pantalla a lo largo de la cinta sería de 10 minutos, a pesar de que figura en el reparto interpretando a la superheroína Mera. Según la actriz, desde que se difundieron estos "engaños" sobre su persona, "se interrumpieron las comunicaciones" con la productora. Amber declaró que la misma situación se produjo en 2017, cuando interpuso una orden de alejamiento temporal contra Johnny Depp. "Me despidieron de trabajos y campañas. Tuve que luchar mucho para mantener mi trabajo y la mayor oportunidad cinematográfica con la que he contado hasta ahora", apuntó refiriéndose a la cinta La Liga de la Justicia, producida por DC Films.
James Franco estuvo con ella la noche antes de pedir el divorcio
En su declaración la actriz, que respondió a las preguntas de los abogados de Depp, reconoció que el actor James Franco estuvo en su casa la noche antes de que pidiera el divorcio de Johnny. La abogada del protagonista de Piratas del Caribe le mostró las grabaciones en las que se la veía llegando con Franco a su casa el 22 de mayo de 2016 (ella solicitó el divorcio el 23 de mayo de 2016). ?Era mi amigo. Vivía en la puerta de al lado, literalmente? aclaró Amber, asegurando que en aquellos momentos ella agradecía cualquier muestra de amistad que pudiera recibir. En su testimonio Amber Heard explicó que mantenía una buena amistad con Franco, con quien hizo dos películas, y dijo también que en ocasiones Depp se ponía celoso y la acusaba de tener romances con sus compañeros de reparto, incluido James (dijo Amber que tuvieron peleas por eso). El propio Depp ya había asegurado en su declaración que pensaba que Heard y Franco tenían un affaire.
Durante este interrogatorio Amber reconoció además ante el juez que no pagó la donación prometida de siete millones de dólares (6,64 millones de euros) que obtuvo del actor tras el divorcio. Este dinero dijo que iba a ser destinado al Children Hospital Foundation, la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU) y otras asociaciones benéficas, pero no llegó a sus destinatarios (lo mencionó sin embargo de forma reiterada en los juicios en los que se ha enfrentado al exprotagonista de Piratas del Caribe).
En la última sesión del proceso, que se reanudó el pasado 16 de mayo tras una semana de paréntesis, declararon iO Tillett Wright, amigo de Amber, y Raquel Pennington, que fue otra de sus amigas. Ambos hablaron de la relación que mantenía la pareja de actores y del comportamiento de Johnny Depp. Entre los testigos que tiene la defensa en su lista y que subirán próximamente al estrado figuran además los nombres de la actriz Ellen Barkin, que salió con Johnny Depp en los años noventa, y Whitney Henriquez, la hermana de Heard. Las sesiones han aumentado su duración pues parece que la intención de la magistrada es finalizar el proceso en este mes de mayo. Johnny Depp ha demandado a su exmujer por difamación y solicita 50 millones de dólares de indemnización por los efectos que tuvo en su carrera el artículo de 2018 en el que Amber Heard se calificaba como víctima de violencia doméstica. Ella exige a Depp 100 millones de dólares por una supuesta campaña de desprestigio en su contra.