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Marcelo, capitán del Real Madrid, triunfa dentro y fuera del campo. El futbolista brasileño, de 33 años, ha formado una gran familia con la actriz Clarice Alves, de la misma edad. Se conocieron en Brasil, cuando eran unos adolescentes, y, desde entonces no se han separado. El 27 de diciembre de 2008 se dieron el 'sí, quiero' en Río de Janeiro y son padres de dos niños, Enzo, de 12 años, y Liam, de seis. Los cuatro viven en Madrid y aseguran que su día a día es "normal y corriente". "Nos gusta hacer cosas en familia, como ir al Retiro con los perros, ir al el centro de Madrid, comer churros con chocolate los domingos… Siempre que podemos vamos al cine y al teatro", dijo Clarice en una entrevista concedida a ¡HOLA!.
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El jugador, cuyo contrato con Real Madrid finaliza el próximo 30 de junio, quiere seguir vinculado al club para cumplir un deseo. "Tengo pensado jugar hasta que mi hijo crezca y podamos jugar juntos", confesó en El Hormiguero. Marcelo lleva más de 15 años en el club blanco y su primogénito comienza a brillar en la cantera como delantero y con el número 9 a la espalda. A finales de marzo, el preadolescente jugó en el XXV Torneo Internacional LaLiga Promises Santander, que tuvo lugar en la Ciudad Deportiva de Maspalomas, Gran Canaria, y anotó dos goles, otorgándole la victoria al Real Madrid. "Muy orgulloso de ganar este torneo con el mejor equipo del mundo. Una experiencia muy bonita que nunca olvidaré. ¡Hala Madrid!", declaró tras celebrar el triunfo con sus compañeros. También estuvo en el campo su madre, Clarice, que intenta, al igual que Marcelo, no perderse ningún partido del joven.
Enzo, que guarda un gran parecido con su padre, sobre todo, por su espectacular pelo, promete en el terreno de juego y en las redes sociales. Tiene cerca de 600.000 seguidores y en su perfil comparte fotos de sus triunfos, pero también muestra su lado más familiar. El futbolista está muy unido a sus padres, que en estos momentos, tal y como señala, son sus representantes.
El pequeño de la familia, Liam, también juega al fútbol y según contó su madre en ¡HOLA! está "superilusionado". Aunque se le da muy bien, "es más artista" y compagina este deporte con el piano. Pese a su corta edad, el niño podría haber heredado la vena artística de Clarice, que es actriz. La brasileña, que estuvo en el Festival de Cine de Málaga, cree que la profesión de su marido no interfiere en la suya y su máxima ilusión es poder rodar con directores a los que admira, como Pedro Almodóvar, Rodrigo Sorogoyen, Juan Antonio Bayona, Álex de la Iglesia o Paco Plaza. También sueña con trabajar con Penélope Cruz o Verónica Echegui.
De momento ha debutado como protagonista en Urubú, la ópera prima de Alejandro Ibáñez que rinde homenaje al maestro Chicho Ibáñez Serrador, y este año tiene previsto rodar otra película en Brasil, su país natal. Además, participó en El ángel de Hamburgo, una miniserie de ocho capítulos sobre la historia de la brasileña Aracy de Carvalho, que arriesgó su vida para salvar a judíos del nazismo.
El amor adolescente de Marcelo y Clarice sigue intacto a pesar de los años. El futbolista es muy detallista con su eposa y la intérprete destaca la vitalidad de su marido. "Cuando está en casa hay mucha luz y mucha vida. Es muy niñero y le encanta jugar", aseguró en ¡HOLA!. Sin duda, un tándem perfecto que vive con ilusión los primeros éxitos de su hijo Enzo.
