Tras la victoria de la Paula Badosa en octubre, Bill Gates no se perdió el regreso de la tenista española al torneo de Indian Wells (California). El cofundador de Microsoft disfrutó del partido de semifinales que disputaron Paula y la griega Maria Sakkari. Lo hizo junto a la misma mujer, de melena morena, con la que fue fotografiado en la Copa Eisenhower, a principios de marzo. Además de compartir grada con esta misteriosa acompañante, de la que no ha trascendido su identidad, Bill se sentó con la actriz Elisabeth Shue y la hija pequeña de esta, Agnes. El empresario informático es un estrecho amigo de Elisabeth, recordada por sus ‘taquillazos’ en los ochenta —como Karate Kid o la saga Regreso al futuro— y la película Leaving Las Vegas, con la que fue nominada a los Oscar en 1995. Ambos suelen jugar al tenis y disfrutan de los partidos con sus respectivas familias, aunque, en esta ocasión, no estuvo el marido de Shue, el cineasta Davis Guggenheim.
Esta aparición de Bill tiene lugar días después de que su exmujer, Melinda Gates, hablara de su separación, anunciada en mayo de 2021, tras veintisiete años de matrimonio y numerosos rumores de infidelidad. “No era sano, no podía confiar en lo que teníamos”, confesó Melinda en una entrevista televisada por la cadena CBS.